Xavi Hernández con la mirada perdida sentado en el banquillo
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Xavi Hernández, el nuevo genio incomprendido: 3 soluciones vitales para la Supercopa

El entrenador del FC Barcelona sigue empeñado en querer gustar y convencer, pero el problema radica en la pérdida en un factor mucho más profundo y elemental


Ser socio o aficionado de un equipo significa, para buena parte de los mortales, hipotecar el alma hasta el último de tus días sobre la faz de la tierra. A través de este equipo al que nos aficionamos descubrimos a qué sabe una victoria, un título y hasta qué nos transmite el silencio tras encajar una dolorosa derrota.

El fiel seguidor del FC Barcelona, aquel que está dispuesto a cualquier cosa para defender su escudo, simplemente pide que Xavi Hernández y los futbolistas que juegan en su equipo tengan, como mínimo, el mismo grado de implicación que él.

Hay veces que, como aficionados al fútbol, nos conformamos con poca cosa. Con simplemente ver que tu equipo lucha, progresa y sigue creciendo, muchos de estos seguidores ya se van más tranquilos a casa, pues sienten que su pasión es compartida con los protagonistas que defienden la historia de su club. A muchas de estas estrellas, acostumbradas a vender su alma al mejor postor, resulta prácticamente imposible exigirles esta reciprocidad, pero Xavi Hernández queda totalmente fuera de esta ecuación.

Xavi Hernández o el genio que nadie parece comprender

Tras algo más de dos temporadas al frente del primer equipo del FC Barcelona, todavía cuesta explicar, con detalle, cuál es la propuesta de juego de Xavi Hernández. Y, particularmente, duele escribir estas líneas, pues estaremos de acuerdo en que el egarense es, sin duda, uno de los máximos exponentes del fútbol total de Can Barça.

Es como si se tratase de un artista que realiza sus obras de forma anónima y que no deja rastro porque nadie sabe quién es. Xavi Hernández, al igual que aquel mago urbano que se dedica a poner color en las calles de la ciudad y que está lleno de interrogantes, ha pasado de ser un referente del modelo azulgrana a ser un artista pretencioso e incomprendido.

Estaremos todos de acuerdo en que Xavi Hernández debe recuperar el camino que le llevó a conquistar la pasada LaLiga EA Sports. Debe volver a fomentar la solidaridad, el compromiso defensivo y el trabajo, pues como bien apuntó, este Barça no tiene tanta calidad como aquel de 2010. Ahora bien, tampoco es un equipo de Segunda Regional, pero el fútbol ha cambiado y, a día de hoy, sin trabajo y sin preparación táctica no vas a ninguna parte.

Xavi Hernández, situación casi de vida o muerte: la Supercopa puede dictar sentencia

En un mundo ideal, como el que diseñó Aldous Huxley, Xavi Hernández sería una estrella, pues resulta evidente que sus conocimientos futbolísticos son francamente excelentes. Ahora bien, también es una realidad que las decisiones sobre el verde las toma y ejecuta él, por lo que nos convierte en meros espectadores incapaces de cambiar su forma de ver las cosas.

Ahí es cuando, en muchas ocasiones, el fiel seguidor del conjunto azulgrana se desespera, pues observa, desde la grada, un entrenador pasivo que parece esclavo de sus ideas.

Las 3 soluciones elementales de Xavi Hernández para la Supercopa

Unas ideas futbolísticas que Xavi Hernández comprendió y terminó de figurar con Pep Guardiola pero que, quizás, no termina de compartir. ¿Y qué tiene de malo? Nada en absoluto.

Así pues, como solución troncal a corto plazo, quizás sería hasta mejor que el de Terrassa no se encasillase en estereotipos y, de una vez por todas, diseñara su Barça, que para eso es el entrenador. Nada de imposiciones y nada de directrices, que apueste por lo que le dice el corazón y acertará, como sucedió cuando le dio la oportunidad a Fermín López, por ahora de lo mejor del Barça en lo que llevamos de año.

Por ahí pasa otra de las grandes soluciones: creer de verdad en la meritocracia. Xavi Hernández debería dejar de apostar por aquellos jugadores que no le dan rendimiento a pesar del nombre y de su historial ganador. Es hora de mirar hacia delante y cambiar vicios del pasado que solo le pueden perjudicar.

Por ahora Xavi Hernández no deja de ser un dibujo en blanco listo para colorear con nuestras ideas o percepciones sobre su figura. Xavi Hernández tiene la misión de devolver a la niñez al aficionado, que solo quiere volver a imaginarse un Barça creativo que permita escapar de la realidad.

¿Será capaz de triunfar en el Barça? El socio azulgrana deberá acostumbrarse a seguir viviendo con esta incertidumbre, al menos por unos meses más.

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