El pueblo catalán que se encuentra a 1 hora de Barcelona y es famoso por sus festivos

Situado en una región histórica de Cataluña, se encuentra un pequeño pueblo que es conocido por su encanto medieval y tradiciones ancestrales. Rodeado de paisajes naturales y lleno de historia, este lugar ofrece una experiencia única para quienes lo visitan. A pesar de su tamaño, es un destino que no deja indiferente a nadie.

Qué hacer en Verges

Verges se sitúa en la comarca del Bajo Ampurdán, y es famoso por su Semana Santa, especialmente por la Danza de la Muerte, una representación que se celebra cada Jueves Santo. Esta tradición, que ha perdurado desde la Edad Media, atrae a muchos visitantes por su simbolismo y su antigüedad. La procesión es dirigida por esqueletos que llevan estandartes con frases que nos recuerdan lo efímero del tiempo y la inevitabilidad de la muerte.

Una de las actividades más populares en la zona es el vuelo en globo. Empresas locales como 'Airona' organizan paseos en globo sobre el Empordà, ofreciendo vistas espectaculares del paisaje. Estos vuelos salen tanto desde Verges como de otros pueblos cercanos, dependiendo de las condiciones del viento, y son una excelente manera de explorar la región desde una perspectiva diferente.

El casco antiguo de Verges también es una parada obligatoria. El castillo, que ha sido reformado a lo largo de los años, alberga el Ayuntamiento, pero conserva vestigios de su pasado como centro de la baronía de Verges. Además, se pueden apreciar las murallas medievales que en su tiempo protegían el núcleo urbano.

Dónde está y su población

Verges se encuentra en la provincia de Gerona, a unos 25 kilómetros al este de la ciudad de Gerona, en pleno Bajo Ampurdán. Con 1.165 habitantes, según el INE, es un pueblo pequeño pero lleno de historia y cultura. Su ubicación lo convierte en un lugar accesible para quienes desean explorar la región sin alejarse demasiado de la costa o las principales ciudades.

Además de su castillo, la iglesia parroquial de San Julián y Santa Basilisa es otro de los puntos de interés. Con su origen románico en los siglos XII y XIII, este edificio ha sido reformado en diversas ocasiones, pero sigue conservando partes originales.

Verges es un destino que mezcla historia, cultura y tradiciones vivas. Desde la emblemática Danza de la Muerte hasta sus calles empedradas, el pueblo es un lugar para desconectar y sumergirse en la esencia del Empordà.