Otro mítico local del centro de Barcelona baja su persiana: ‘Sentimos cerrar’

Otro mítico local de Barcelona se despide de su clientela para siempre. Se trata de la Papelería Navarro, un emblemático establecimiento de la zona de San Cristóbal en la Marina de Port. El cierre definitivo llega después de más de 70 años de actividad y lo hacen con una disculpa.

Así lo ha recogido el medio ToTBarcelona. “Sentimos cerrar”, se puede leer en su puerta. Situado en el paseo de la Zona Franca, este local no solo era una papelería, sino también una librería, copistería y juguetería.

Durante varias décadas se ha convertido en un referente para los vecinos de este barrio de Barcelona. Y es que la Papelería Navarro fue el primer comercio en abrir en el conjunto de viviendas de la SEAT. Un complejo construido en los años 50 para los trabajadores de la fábrica de automóviles.

Desde su fundación en 1955 por Enrique Navarro, la papelería ha sido testigo y partícipe de la vida diaria del barrio. Formando un vínculo estrecho con sus clientes a lo largo de los años.

El local se despide de Barcelona

En la entrada de la tienda, un cartel colocado por los propietarios anuncia con tristeza el cierre: “Sentimos cerrar este negocio”. Y la razón es igual de clara que triste.

“Las futuras generaciones tienen otros horizontes y cada cual tenemos que seguir nuestro camino. Os llevaremos siempre en el corazón, sois parte de nuestra vida”, sentencian.

Este mensaje refleja la conexión emocional que existía entre la papelería y sus clientes. La historia de este local de Barcelona es también la de una familia que se ha volcado al completo con su profesión. Enrique Navarro fundó la tienda junto a su esposa y sus dos hijos, Enrique y Eugenia.

Ellos continuaron trabajando en el negocio familiar. Posteriormente, Esther, otra miembro de la familia, asumió la gestión de la tienda, manteniendo viva la tradición familiar.

Las cosas cambian para siempre

Ahora, el cierre del local marca el fin de una era para el barrio de San Cristóbal de Barcelona, dejando un vacío difícil de llenar. La papelería Navarro es el último negocio de este tipo que quedaba en la Marina de Port. Y su ausencia será sentida por muchos que crecieron y vivieron con su presencia constante.

Con la desaparición de la Papelería Navarro, la zona no pierde solo un comercio. También se despide de un punto de encuentro y una pieza fundamental en la historia de esta familiar zona de Barcelona.