La mítica tienda de zapatos que ha bajado la persiana en Barcelona

Los pequeños comercios familiares han sido substituidos en los últimos tiempos por otro tipo de negocios. La revolución tecnológica nos ha llevado a la era digital en la que vivimos, que ha propiciado el auge del comercio online.

Además, en las grandes ciudades, como Barcelona, estas tiendas de barrio han sido reemplazadas por otro tipo de establecimientos enfocados al turismo y al consumismo. Barcelona ha perdido la gran mayoría de este tipo comercios, propiciado por el cambio de hábitos de consumo.

Este es el caso de Calzados Cubedo, que el año que viene cumplía un siglo en funcionamiento. Sin embargo, no podrán celebrarlo, tras bajar la persiana de sus dos últimos locales el pasado sábado. La televisión de Barcelona, Betevé, ha publicado un reportaje en el que entrevistan a su propietario y narran su historia y los motivos del cierre. 

El barrio de la Barceloneta pierde su única zapatería

Calzados Cubedo "fue la primera y será última" zapatería del barrio de la Barceloneta. El cambio de hábitos de los consumidores ha generado una gran disminución de sus ventas. Tras 99 años de servicio, se han visto obligados a bajar la persiana.

La tienda ubicada en la calle Atlántida de Barcelona era más pequeña y su clientela se centraba en vecinos del barrio y personas mayores que seguían comprando en sus comercios de confianza. Lamentablemente, esto no daba suficientes beneficios para mantener el negocio abierto.

De esta manera, La Barceloneta presenció como cerraba su última tienda de calzado. Los propietarios lamentan haber tenido que cerrar justo antes de cumplir 100 años. Todo esto, no hace más que dañar el comercio local y de proximidad. 

Barcelona está de luto por esta pérdida

En 1925, el abuelo de Josep Cubedo, actual copropietario junto a su hermana, inauguró la primera zapatería en el barrio de la Barceloneta. Un tiempo después, llegaron a tener seis tiendas, de las cuales actualmente solo dos permanecían abiertas. La primera y la que se encontraba en la vía Layetana, al lado de la plaza del Ángel, que abrió hace 47 años.

Esta última era muy conocida por los vecinos por su antigüedad y su buena localización. Por este motivo, también era muy frecuentada por visitantes y turistas, que en los últimos años suponían un 90% de sus ventas. Pero, según cuenta el responsable, a partir del 2017 empezaron los problemas. 

Este volumen de clientes extranjeros fue menguando, a partir de agosto, a raíz del atentado en la Rambla de Barcelona. Seguidamente, empezaron las obras para instalar un ascensor en el metro de Jaime I, que se encuentra justo delante de la zapatería, y se alargaron durante dos años. Estas provocaron la desviación del tráfico de los transeúntes y "aquí no entraba nadie", lamenta Josep. 

Las consecuencias de la pandemia y el apogeo de las plataformas de venta online se han sumado, actualmente, a las obras de reforma de la vía Layetana. Por último, remarca las altas exigencias del Ayuntamiento de Barcelona como motivo definitivo de la liquidación. Aunque son propietarios del local, aseguran que "estamos en una finca con tres catalogaciones y solamente por arreglar cosas del edificio, los últimos tres años hemos estado pagando 1.400 euros mensuales".

Los responsables han decidido conservar la propiedad de este hasta encontrar a los inquilinos ideales, pese a que han recibido muchas ofertas por su buena ubicación. Finalmente, han optado por alquilar el local a una pareja de la ciudad que abrirá una tienda de ropa.

Tomando estas medidas, querían evitar que se repitiera el caso de otro local que cerraron en 2020, a causa de la competencia desleal de los vendedores ambulantes ilegales. Debido a la necesidad económica decidieron venderlo. En su lugar se encuentran un negocio de fundas de móvil, uno de gafas y otro de 'souvenirs'. Cubedo considera que esto "empobrece el comercio".