Cierra uno de los restaurantes más carismáticos y especiales de Cataluña

Cataluña se quedará, próximamente, sin uno de sus restaurantes más espectaculares. Se trata de uno de los más exclusivos del territorio, puesto que solo se puede acceder andando.

Se trata del restaurante de 'La Mola', ubicado en la cima del Parque Natural de Sant Llorenç del Munt y l'Obac, que da servicio desde hace 57 años, cuando todo era de un particular. Ahora, tal y como ha avanzado, Món Terrassa, el restaurante se ve obligado a bajar sus persianas por orden de la Diputación de Barcelona.

La Diputación de Barcelona quiere cerrar el restaurante

Tras 57 años dando servicio, el restaurante de 'La Mola', se verá obligado a cerrar el próximo 22 de enero, por orden de la Diputación de Barcelona, quien gestiona el Parque Natural. Según ha indicado el medio citado, cuando la Diputación compró los terrenos, la familia Gimferrer obtuvo el traspaso del restaurante y, desde que en los ochenta la Diputación lo abrió a concurso público, solo ellos se han presentado a la licitación.

Ahora, la concesión se termina y la familia Gimferrer no podrá renovarlo. La Diputación ha tomado la decisión porque cree que para preservar el patrimonio cultural y natural hay que cambiar el modelo de gestión. Añaden que el generador que se usa para tener electricidad contamina, por el combustible que gasta y por el ruido que hace.

A pesar de que la familia conocía desde 2018 que la concesión era improrrogable, denuncian que no les han dicho nada durante estos últimos años y ahora les han comunicado que deben cerrar 'inmediatamente'. Confiaban en que llegarían a un acuerdo para poder continuar con el servicio, pero la Diputación se niega.

Además, añaden que el cierre provocará que unas veinte personas se queden desempleadas y miles de comensales sin comer en 'La Mola'. Por su parte, la Diputación, considera que el cierre del restaurante acabará con la masificación y reducirá los impactos sobra la flora y la fauna.

Sin embargo, los Gimferrer consideran que esto solo provocará que el entorno y el edificio queden degradados, ya que ellos llevan cuidándolos desde hace 57 años. Además, reclaman a la Diputación que les dejen seguir abiertos hasta que tengan el nuevo proyecto y sus fechas de inicio definidas.

Más de 10.000 firmas para impedir el cierre de 'La Mola'

Ante esta situación, la familia no tira la toalla y confía en que la Diputación se lo piense gracias a la presión popular. Actualmente, ya se han recogido más de 10.000 firmas para impedir el cierre.

Para muchos de sus clientes, 'La Mola' no es solo un restaurante, sino un lugar donde conectar con la naturaleza, ya que solo se puede subir andando. Aunque la Diputación mantiene la puerta abierta a reabrir el restaurante cuando esté finalizada la transformación del entorno, los Gimferrer creen que no serán ellos quienes continuarán con la gestión.

La complexidad que les supondrá bajar todo el material de la montaña y garantir la supervivencia de los animales les hace pensar que estos serán sus últimos días al frente del restaurante.