La inseguridad crece imparable en Cataluña: 'altercado con arma blanca'
Rocafonda, considerado 'el Raval de Mataró', ha vuelto a ser escenario de un suceso muy compartido en las redes
El barrio de Rocafonda en Mataró ha sido escenario en las últimas horas de un suceso que ha generado gran expectación. La cuenta de Twitter Patrulla Veïnal Mataró ha compartido las imágenes en el que se ve un gran despliegue de policías, bomberos y emergencias. Los vecinos se agolpan en la calle y en los balcones para seguir este suceso, que demuestra una vez más el grave problema de incivismo e inseguridad que padecen los barrios de las principales ciudades en Cataluña.
La noticia fue compartida y viralizada ayer en cuentas de Telegram, en la que hablaban de un altercado protagonizado por marroquíes “con arma blanca y todo”. En las imágenes se ve a la policía y los bomberos con la calle cortada, y una aglomeración de vecinos y transeúntes. En las redes sociales han circulado toda clase de versiones sobre lo ocurrido en este barrio de Mataró castigado por la delincuencia.
Muchos vecinos recuerdan aún los disturbios de hace dos años, cuando una turba atacó a la policía tras efectuar una detención. El año pasado la policía desalojó a unos okupas conflictivos, y meses después ejecutó una operación antidroga en este barrio que ya es tristemente conocido como “el Raval del Mataró. El pasado mes de enero registraron varios bares de Rocafonda tras muchas quejas vecinales, y encontraron armas y drogas dentro.
¿Modelo de integración o fracaso multicultural?
Curiosamente, el barrio de Rocafonda ha sido objeto de un lavado de imagen por parte de varios medios catalanes, que lo exponen como ejemplo de integración con Lamine Yamal como símbolo. La realidad es que el barrio ha sufrido una imparable degradación y los vecinos claman desesperados que la situación es límite. La escena vivida ayer no es nada nuevo y se ha convertido en una estampa habitual.
Rocafonda es uno de los barrios más pequeños de Mataró en extensión, pero uno de los más poblados. A la densidad se añade la realidad multicultural, ya que de los 15.000 habitantes más del 50% es de origen extranjero, la mayoría de Marruecos. La inmigración no ha parado de crecer estos últimos años junto a los problemas de convivencia, aunque las autoridades legales niegan el problema y la izquierda sigue hablando de modelo de convivencia.
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