Dos policías, brutalmente agredidos en plena calle en Alicante

Todo empezó con una multa por aparcar mal y terminó con cinco arrestados por agredir a dos agentes de la Policía Local de Guardamar del Segura (Alicante). El conflicto se produjo el domingo 27 de agosto cuando uno de los policías afectados fue a ponerle una sanción a un hombre por tener mal aparcada su furgoneta en la zona del paseo marítimo. En ese momento, el sujeto, que decía ser el titular del vehículo, comenzó a increpar a los agentes junto a su familia hasta el punto de empezar a pegarles patadas y puñetazos.

Tal fue la magnitud de la agresión, que uno de los atacantes llegó a quitarle a uno de los agentes la pistola eléctrica incapacitante, con la que realizó un disparo fallido. Los agentes intentaron defenderse con la porra, pero la familia agresora era más numerosa. No fue hasta la llegada de los refuerzos de la Guardia Civil y la Policía Local cuando consiguieron disolver la riña.

Instantáneamente, los tres principales involucrados fueron detenidos en el lugar de los hechos acusados de un delito de atentado contra agente de la autoridad. Al día siguiente, tras el visionado de las imágenes, la Guardia Civil detuvo a otros dos miembros de la familia y empezó a investigar a un varón de 17 años, acusados del mismo delito. Los supuestos agresores han quedado en libertad con cargos mientras los hechos se encuentran en investigación.

El sindicato alerta del aumento de agresiones policiales

Tras este grave incidente, el Sindicato Profesional de Policías Local y Bomberos (SPPLB) emitió un comunicado a través del que condenaba la "violenta" agresión que sufrieron los dos agentes de la localidad alicantina. Además, hacían una alerta "a la opinión pública y a todos los poderes públicos" recordando "que las agresiones a los policías van en aumento".

Así, desde el sindicato solicitan al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, y a las Cortes Valencianas que se modifique la normativa autonómica para prohibir que los consistorios establezcan patrullas unipersonales. Además, piden que se dote obligatoriamente a los policías locales de pistolas eléctricas Taser, chalecos antibalas y antipunzón y armas de fuego largas. Así como que los agentes interinos, previo curso de instrucción de su manejo, posean armas de fuego.

En los últimos meses, la comunidad valenciana ha sido objeto de riñas y trifulcas en las que su protagonista ha sido la violencia. En Alicante, el pasado 16 de junio, dos jóvenes fueron detenidos por protagonizar dos peleas, en diferentes días, con botellas rotas y machetes. Asimismo, el pasado lunes una reyerta multitudinaria, también con armas blancas, interrumpía el paso de vehículos y peatones en la localidad valenciana de Sueca.