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SUCESOS

La brutal pelea entre jóvenes en Lérida que retrata la situación actual en Cataluña

Un vecino grabó la escena y está corriendo como la pólvora por las redes sociales

El fenómeno de las peleas entre jóvenes extranjeros se está extendiendo rápidamente por varias ciudades de Cataluña, generando una sensación de miedo e inseguridad entre los vecinos. Hace unos días fueron Tortosa y Olot, esta misma semana ha habido una reyerta mortal en la Barceloneta, y ahora salen las imágenes de otra trifulca. Se trata de una brutal pelea entre menas que acaba con uno de ellos en el suelo, noqueado.

En las imágenes se aprecia a dos jóvenes, uno sin camiseta y otro con chaqueta azul, que mantienen una acalorada discusión. La tensión va subiendo hasta el punto de que otros tres chicos tienen que intervenir para separarlos. Cuando parece que la situación se ha calmado los dos jóvenes vuelven a enzarzarse a puñetazo limpio mientras los otros miran, hasta que uno de ellos suelta el golpe fatal que noquea al de la chaqueta azul.

El agresor remata a la víctima en el suelo con una patada en la cabeza, y acto seguido el resto de la pandilla intenta reanimarlo. La escena fue grabada por un vecino, y está siendo muy compartida en las redes sociales como testimonio de la situación que se vive día a día en muchos barrios de Cataluña. Cada vez son más las voces que piden la deportación de los extranjeros multirreincidentes y más mano dura contra la delincuencia.

Peleas entre menas, un problema en expansión

Hace unos días llamaron la atención las imágenes de una reyerta con palos y cuchillos entre jóvenes extranjeros en pleno centro de Tortosa (Tarragona). Días antes, otra pelea había tenido lugar en el centro de Olot (Girona) con la participación de unos treinta pandilleros. Esta semana ha habido dos peleas mortales, una en la Sènia y otra en la Barceloneta, y la situación se está trasladando a otros barrios de las ciudades catalanas.

Esto plantea un problema de seguridad y abre un debate sobre la gestión del orden público en Cataluña. La izquierda niega que haya un problema de inseguridad y llama a no criminalizar a los colectivos vulnerables como la inmigración ilegal. La derecha afirma que Cataluña se encuentra en una situación límite y que ha llegado el momento de imponer la mano dura para restaurar la convivencia.

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