Una mujer abanicándose con un vano para no pasar tanto calor
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El truco definitivo para enfriar tu casa sin aire acondicionado: debes hacer esto

Escoge entre cinco soluciones baratas, a tu alcance y que te ayudarán ahora que empieza el calor


El 22 de junio marca el inicio oficial del verano, una época esperada por muchos, pero que también trae consigo altas temperaturas que pueden resultar difíciles de sobrellevar. Ante esta situación, es fundamental saber cómo mantener la casa fresca durante los días calurosos. Si bien el aire acondicionado es una opción efectiva, su instalación y consumo energético pueden ser costosos. Por eso, aprender métodos alternativos para refrescar el hogar se vuelve esencial.

Una de las estrategias clave para mantener la casa fresca es bloquear la entrada de calor desde el exterior. Bajar las persianas y cerrar las cortinas durante las horas más soleadas del día ayuda a evitar que los rayos del sol aumenten la temperatura interior.

Asimismo, es recomendable cerrar las ventanas durante el mediodía para evitar que el aire caliente entre en la casa. Por la noche, abrir las ventanas puede ayudar a refrescar el ambiente, especialmente si se crea una corriente de aire abriendo ventanas contrapuestas.

Un hombre usando un ordenador portátil en frente de un ventilador encendido

Cambio sencillos y útiles

Eliminar o sustituir textiles pesados también contribuye significativamente a reducir el calor en el hogar. Alfombras gruesas, cortinas pesadas y edredones deben ser reemplazados por materiales más ligeros que permitan una mejor circulación del aire. Además, humedecer el suelo antes de dormir puede ayudar a refrescar la habitación de manera inmediata.

Un truco eficaz para enfriar una habitación es colocar hielo delante de un ventilador. Esto permite que el aire se enfríe al pasar sobre el hielo, creando una sensación de frescor. Además, agregar plantas de interior no solo decorará el hogar, sino que también ayudará a reducir la temperatura ambiente de forma natural.

Otro consejo útil es conectar las habitaciones más frías con las más cálidas para crear una corriente de aire que distribuya el frescor de manera uniforme. Además, apagar electrodomésticos y luces cuando no se estén utilizando puede ayudar a reducir la emisión de calor en el hogar.

Por último, colocar recipientes con agua y hielo en puntos estratégicos de la casa puede contribuir significativamente a refrescar el ambiente. Este truco simple, pero efectivo aprovecha la capacidad del agua para absorber el calor y proporcionar una sensación de frescura en el hogar.

En conclusión, con estos consejos prácticos es posible mantener la casa fresca durante el verano sin depender exclusivamente del aire acondicionado. Al adoptar medidas simples y efectivas, podemos disfrutar de un ambiente agradable y confortable, incluso en los días más calurosos del año.

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