Montaje de Santiago Niño Becerra junto a un marco y una imagen de dinero
SOCIEDAD

Santiago Niño Becerra insiste en el gran problema de la economía española ahora mismo

Niño Becerra da unas cuantas claves para mejorar la situación del empleo

El prestigioso economista Santiago Niño Becerra se acaba de pronunciar sobre uno de los grandes asuntos que preocupan al país. La situación económica no resulta tan boyante como pudiera parecer.

En las últimas horas realizaba una valoración sobre una noticia de Expansión. En ella se recogía que el mercado laboral español había perdido durante este siglo 4,5 millones de personas de 20 a 40 años. Esto sería uno de los motivos por los que las empresas se encuentran tantas dificultades para cubrir algunos puestos.

La brutal caída de la natalidad y el envejecimiento de la población se esconderían detrás de esos datos tan pesimistas. Resulta especialmente preocupante la situación que se registra en la cornisa cantábrica, que lidera esta crisis de ocupación.

Santiago Niño Becerra ofreció su punto de vista al respecto. Se muestra contrariado con este informe presentado por la patronal de la pequeña y mediana empresa Cepyme.

Sostiene que "en España, con un 12% de paro y un 15% de subempleo forzoso. Además de "1 millón de emigrados desde 2008, el problema no es de falta de demografía". Lo atribuye sobre todo a la "productividad baja e insuficiente".

Tal y como recogía dicho estudio, los males que sufre el sector laboral en nuestro país solo se remediarían con un aumento de habitantes. Pero el economista cree que esto "agravaría el problema" aún más.

Niño Becerra no aprecia un problema de demografía

Con anterioridad también se pronunció sobre otra información vinculada con la demografía. En ella se desvelaba que en 2026 la población europea alcanzaría su techo y a partir de ahí empezaría a encoger. Indicaban que aumentaría la presión económica al haber una menor tasa de actividad y más de dependencia.

Santiago Niño Becerra insistía en su mensaje. Sostiene que Europa "no tiene un problema de baja población, sino de baja productividad", algo que se agrave en el caso de España. Explica que el "desempleo juvenil, el subempleo no deseado y la emigración muestran que, o sobra población activa o no se retiene la necesaria".

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