Pruebo las patatas fritas con sabor a kétchup de Mercadona y me llevo una sorpresa

Juntar dos alimentos que gustan y mucho a la gente puede salir bien o ser una idea horrible. En este caso, Mercadona ha acertado doblemente. En primer lugar, porque la mezcla está realmente buena y en segundo porque ha decidido volver a vender este producto.

Te estoy hablando de las patatas fritas sabor kétchup de Mercadona. En ellas puedes encontrar unas patatas fritas onduladas bien triscantes que se mezclan con el sabor del kétchup. Una insana mezcla que la verdad es que no puede estar más rica.

Aunque las hayas visto como novedad en tu tienda más cercana, lo cierto es que no lo son. Y es que hace tres años ya existían en esta cadena y de un día para otro se dejaron de vender. Tan fue la indignación de los clientes que algunos incluso iniciaron campañas para solicitar su vuelta a las estanterías.

Estas patatas de Mercadona tienen un sabor bastante conocido

Cuando abres el paquete de patatas, el olor que sale ya te da una gran pista de cómo van a saber. Y es que, aunque haya gente que recuerde cómo sabían, no hace falta remontarse tanto. Es más, yo no las probé en su momento y no he tenido ningún problema al reconocerlo.

No sé si donde vives se vende el snack Apetinas de Tosfrit, porque si es así seguro que me entiendes. Estos son unas pajitas hechas con fécula de patata que en una de sus variedades tienen un fuerte sabor a kétchup. Estuvieron muy presentes en mi infancia e identifiqué ese olor rápidamente al abrir el paquete de estas patatas de Mercadona.

El interior de la bolsa huele a kétchup y mucho, pero cuando las pruebas también notas los ingredientes. Por un lado, tienes el dulce que le aportan tanto el tomate como la cebolla. Pero también tienen un ligero picor que le viene dado por el pimentón, razón también por la que tus manos pueden quedarse naranjas.

Mercadona aconseja consumirlas preferentemente en el mismo día

Esto que destaco en el título es algo que me ha llamado la atención a la hora de revisar el envase. También te diré que no es algo que haya cumplido, ya que salvo que tengas visita en casa, es demasiado. Con una pinza se me han conservado perfectamente, al final es una recomendación, no una obligación.

Su composición es bastante sencilla a simple vista. El 60,8% corresponde a patatas y el 33% a aceite de girasol. El problema viene con el 6,2% del preparado con sabor a kétchup, en el que encontramos, por ejemplo, potenciador del sabor.

En su información nutricional lo que llama la atención son las calorías, conteniendo 545 kcal por cada 100 gramos de producto. En este caso, cada paquete de patatas fritas con kétchup contiene 130 gramos, por lo que incluso la cantidad es superior. Por eso mismo, no es nada recomendable abusar de ellas más que como un aperitivo casual.