El fruto seco que debes añadir a tu dieta y lo que has de eliminar para vivir más

Un reciente estudio liderado por la doctora Sabrina Schlesinger, del Centro Alemán de Diabetes, ha mostrado los beneficios para la salud cardiovascular el hecho de reemplazar la proteína animal por fuentes vegetales.

La investigación revisó 30 estudios que analizaron poblaciones que adoptaron dietas vegetarianas o que priorizaron la proteína vegetal, destacando especialmente el papel de los frutos secos.

Según los resultados, sustituir 50 gramos de carne procesada por una cantidad equivalente de nueces podría reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares en un 27%. Además, reemplazar la proteína cárnica con legumbres disminuyó el riesgo en un 23%.

Legumbres y frutos secos

La nutricionista experta en cáncer, Emilia Gómez-Pardo, respalda estos hallazgos, subrayando que una dieta rica en productos vegetales puede prevenir diversas enfermedades, incluyendo el cáncer.

Aunque la preferencia por frutos secos parece tener un ligero beneficio adicional, Gómez-Pardo destaca la importancia de las legumbres. Por su bajo coste económico, alto contenido proteico y fibra, y elementos esenciales para la salud.

El estudio también sugiere que la sustitución de alimentos de origen animal por opciones vegetales está asociada con un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y mortalidad general. Aunque no se hace una recomendación directa hacia el vegetarianismo, se destaca la versatilidad de la alimentación saludable, adaptable a diversas preferencias y éticas.

Gómez-Pardo enfatiza que no es necesario adoptar una dieta exclusivamente vegetal, pero aboga por priorizar alimentos vegetales, ricos en fitonutrientes esenciales para combatir enfermedades. Aunque se ha debatido sobre el consumo de carne, especialmente las carnes rojas y procesadas, la evidencia sugiere que reducir su ingesta puede tener beneficios para la salud.

Consumir mucha carne puede ser peligroso para nuestra salud

En cuanto a la asociación entre carnes rojas y procesadas con ciertos tumores, Emilia Gómez-Pardo resalta la falta de pautas claras sobre un consumo seguro. Un estudio de 2022, indica un menor riesgo de cáncer colorrectal entre quienes consumen carne menos de 6 veces por semana. Siendo un 14% menor entre vegetarianos.

Además, hay pruebas de que las carnes procesadas son potencialmente cancerígenas. El consumo de carne en España, aunque en descenso, sigue siendo el doble de lo recomendado por la AESAN, concentrándose en perfiles específicos de la población.