Vox pide la deportación de los presos extranjeros en Cataluña: 'cuánto nos cuesta'

La inmigración y la seguridad es el tema que marca la agenda política de Vox en esta legislatura en Cataluña. El partido de Ignacio Garriga vincula la inmigración ilegal masiva con la degradación de la seguridad en los barrios catalanes. Proponen como solución "billete de vuelta", o sea la deportación, de los delincuentes extranjeros.

Vox en Cataluña ha lanzado una nueva campaña para insistir en esta idea. La formación ha destapado que "los presos extranjeros en las cárceles catalanas nos cuestan cada año 227,6 millones de euros a todos los catalanes". 

Además, van más allá y se preguntan "qué se podría hacer si deportáramos a los presos extranjeros". Vox plantea algunas medidas para mejorar la vida de los catalanes, que se podrían llevar a cabo con esta cantidad de dinero.

Qué se podría hacer

"Si deportáramos a todos los presos extranjeros de las cárceles catalanas podríamos construir 1.715 viviendas sociales nuevas cada año", afirma Vox. También "cubrir al año el coste completo del comedor escolar de 90.240 niños catalanes".

Además, según la formación con este dinero se podría "instalar un parque eólico cada año con 54 aerogeneradores". Otra medida podría ser "financiar 4,5 millones de visitas de atención primaria y acabar con las listas de espera en los CAPs de Cataluña". El dinero podría servir igualmente para "cubrir el 100% de la matrícula universitaria de 182.370 alumnos".

"Si deportáramos a todos los presos extranjeros de las cárceles catalanas podríamos construir 1.138 campos de fútbol base al año", añaden. 

Son solo algunas de las medidas que según Vox se podrían llevar a cabo para mejorar la vida de los catalanes, con el dinero que cuesta mantener a los presos extranjeros.

Islam y feminismo

En la última sesión parlamentaria Júlia Calvet recordó que "en 2023 el 50% de hombres que mataron a sus mujeres eran de nacionalidad extranjera". Calvet señaló como motivo de la violencia machista el hecho de "importar individuos procedentes de culturas donde se denigra a la mujer". Y mencionó concretamente el islamismo, que "oprime la mujer y la despoja de sus derechos y de su dignidad".

"¿Eso no es violencia?", preguntó al resto de grupos de la cámara. "Más del 90% de los condenados por violación eran extranjeros, teniendo en cuenta que solo representan el 17% de la población. Ustedes no reconocen esta situación, esconden los datos, y esto les convierte en cómplices".