TV3 hace de altavoz de Clara Ponsatí mientras sigue silenciando a Sílvia Orriols
La televisión pública catalana sigue mostrando sin pudor sus preferencias políticas y ejerciendo el veto a otras opcione
La función de una televisión pública es garantizar el acceso de los ciudadanos a la información de acuerdo con los criterios de objetividad e imparcialidad. Sin embargo, en Cataluña hace tiempo que TV3 se ha convertido en árbitro de la verdad. Así ha quedado demostrado una vez más con el favoritismo hacia el nuevo partido de Clara Ponsatí, que contrasta con el cordón sanitario impuesto a Sílvia Orriols.
Uno de los criterios que debe guiar el proceder de la televisión pública es el de relevancia. Sin embargo, aunque Aliança Catalana ganó las elecciones municipales en Ripoll y lleva meses marcando la agenda política catalana, en TV3 optaron por el silencio mediático primero y la intoxicación después. Esto contrasta con el entusiasmo por Clara Ponsatí, a la que han entrevistado el mismo día que anunció la creación de un nuevo partido.
La propia Sílvia Orriols ha ironizado diciendo que “a mí no me entrevistan en ‘TV3 la suya’ ni os cobraré 12 euros para contar mi proyectos de Estados”. La líder de Aliança Catalana hace referencia al acto de presentación del nuevo partido de Clara Ponsatí, Alhora. Será el 23 de abril en el Teatro Borràs de Barcelona, con las entradas a doce euros.
Compiten por un mismo espacio electoral
En el entorno de Aliança Catalana creen que si Sílvia Orriols anunciara hoy que se presenta a las elecciones sería ignorada por TV3. Según el periodista Sergi Maraña, “que saquen ya a pasear a Clara Ponsatí el día que anuncia que quiere montar una alternativa a los partidos procesistas, solo significa una cosa: que a los partidos que controlan TV3 les interesa patrocinarla para que los de siempre mantengan el poder”.
Clara Ponsatí, exconsejera de Educación bajo la sombra de Carles Puigdemont, rompió este verano con el expresident y ahora anuncia la creación de un nuevo partido. Alhora nace con dos ítems, “la independencia y el buen gobierno”. Sin embargo, lo que algunos presentan como un desafío a los partidos procesistas, otros lo ven como un partido procesista más.
Clara Ponsatí y Sílvia Orriols compiten por un mismo espacio electoral, el del independentismo indignado. Pero la primera cuenta con el altavoz de la televisión pública catalana mientras que la segunda trata de sobreponerse al silencio mediático. De hecho, Aliança Catalana trata de explotar el cordón sanitario para reforzar su imagen como representación popular contra las élites políticas y mediáticas.
Simpatías y vetos en la tele catalana
“Clara Ponsatí tiene un plan, tiene un proyecto”, decía la presentadora del programa Tot es mou, mientras la política se reía con mucha complicidad. No cabe duda de que la exconsejera despierta simpatías en la televisión pública catalana. Todo lo contrario que Sílvia Orriols, tildada como “extrema derecha” y vetada en programas y entrevistas.
El nuevo partido de Ponsatí reivindica abiertamente la necesidad de que Cataluña tenga las competencias en inmigración para impulsar una integración catalanizadora de los extranjeros. Un debate abierto por Aliança Catalana y asumido primero por Junts y ahora por Alhora. Pero para TV3 la reivindicación es más digerible cuando la propone un espacio político como el de Clara Ponsatí y Jordi Graupera que cuando la formula Aliança Catalana.
Mientras, Sílvia Orriols sigue preparando en la sombra su candidatura para las próximas elecciones catalanas, previstas en febrero de 2025. El independentismo antiinmigración está ultimando su programa político antes de anunciar que se presenta a los comicios. El objetivo es desembarcar en el Parlament para seguir creciendo como alternativa a los partidos procesistas.
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