
Sigue la inseguridad en Cataluña: 28 apuñalamientos y 4 tiroteos en un mes
Los esfuerzos del Departamento de Interior no consiguen controlar la lacra de la inseguridad
La inseguridad sigue marcando el pulso cotidiano en Cataluña, donde los episodios de violencia se han convertido en una constante. En solo algo más de un mes, la región ha registrado al menos 28 apuñalamientos y 4 tiroteos. Así lo ha publicado el perfil “El Apuñalómetro” en la red social X, que ha retomado su actividad tras 38 días sin actualizaciones. “Esta es la realidad: una Cataluña más criminal y más insegura”, reza el mensaje publicado esta semana:
La cifra refleja una situación preocupante, en especial por la frecuencia y el carácter violento de los hechos. Desde hace meses, Cataluña arrastra un repunte sostenido de ataques con armas blancas y fuego. A pesar de los planes de choque implementados por Interior, con la consejera Parlon al frente, las estadísticas confirman que el problema persiste.
Ya en abril, los datos oficiales reflejaban una oleada de apuñalamientos. En una sola semana se produjeron más de diez agresiones con cuchillo, una de ellas con resultado mortal. La víctima, un hombre asesinado en el paseo marítimo de Roda de Berà, fue apuñalada de madrugada. Según testigos, varias personas de origen extranjero participaron en el ataque. Los Mossos d’Esquadra identificaron a los presuntos responsables, que aún no han sido detenidos.
Durante aquellos días también se registraron agresiones en L'Hospitalet de Llobregat, Barcelona, Castelldefels y Lérida. Algunos de los incidentes ocurrieron en espacios públicos muy concurridos, como estaciones de metro, terrazas de bares y calles céntricas. Uno de los apuñalados recibió una puñalada en el pecho en pleno centro de la capital catalana.

El Govern se esfuerza, pero los resultados tardan
Los Mossos aseguran estar intensificando los controles. En septiembre del año pasado, se activó el plan Daga, que permitió requisar más de 11.000 armas en seis meses. De ese total, unas 4.500 eran blancas y 560 de fuego. La gravedad del fenómeno ha obligado a lanzar también operativos específicos contra la multirreincidencia, como el llamado Kanpai, que movilizó a más de mil agentes en Barcelona y su área metropolitana.
A pesar de los esfuerzos, la percepción de inseguridad sigue creciendo. En lo que va de 2025, se han contabilizado once homicidios por apuñalamiento en Cataluña. A esto se suman las muertes por arma de fuego, muchas de ellas ligadas al crimen organizado. Las autoridades reconocen que, aunque se han tomado medidas, los resultados tardarán en llegar.
La consejera de Interior, Núria Parlon, ha admitido públicamente que la situación es grave. A diferencia de su predecesor, ha impulsado planes de actuación de carácter urgente. No obstante, la ciudadanía sigue reclamando, necesitando más bien, una respuesta firme y definitiva.
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