VÍDEO | Samuel Vázquez retrata en 1 minuto la Barcelona de Ada Colau y lanza un aviso

Samuel Vázquez se ha convertido desde hace tiempo en una voz autorizada al hablar sobre delincuencia, seguridad y orden público. El presidente de la asociación Policía Siglo XXI ha sido recientemente nombrado como portavoz de Vox para reforzar el discurso contra la inmigración ilegal. The Objective ha publicado este jueves su primera entrevista en el cargo, y no ha dejado indiferente a nadie.

Reflexionando sobre la degradación criminal de Barcelona, Samuel Vázquez sentencia que “el mal menor siempre lleva al mayor de los males”. Es decir, que para él todo empieza con la permisividad de las autoridades ante la delincuencia. Por eso, dice, “sabíamos que la Barcelona de Ada Colau caería primero”.

El mediático policía explica que en Barcelona todo empezó con la tolerancia hacia los okupas. “La casa okupada es una zona de exclusión donde no hay autoridad”, advierte, donde “acaban entrando los delincuentes porque es el mejor sitio para vender droga”. Cuando estos delincuentes se multiplican, “aparecen los machetes, llegan los clientes de la droga, tu barrio se degrada cada vez más”.

El pronóstico de Samuel Vázquez

Pero Samuel Vázquez insiste en que todo este proceso parte de las políticas municipales, y por eso sabían que la Barcelona de Ada Colau era carne de cañón. La tolerancia y la permisividad de la izquierda hacia la okupación ha generado según este experto en un clima favorable a la reproducción delincuencial. Un proceso de degradación que se irá extendiendo a otras ciudades españolas en los próximos años.

Señala Zaragoza, Valencia y Bilbao como las herederas de Barcelona, y alerta sobre la grave situación que se avecina sobre la capital, Madrid. "En seis o siete años caerá Madrid, pero su caída será mucho más abupta y estará mucho peor que Barcelona", vaticina. Esto así porque "cuando magrebíes y subsaharianos lleguen a Madrid se darán cuenta de que ya están las bandas latinas establecidas allí".

Vázquez explica que estas bandas se disputan dos cosas, la mercancía y el territorio. "Cuando una banda llega a un territorio yermo, como los marroquíes y los subsaharianos en Barcelona, tardan más en aparecer los machetes y el proceso es más gradual", afirma. En cambio, según su previsión, cuando las nuevas bandas se hagan fuertes en Madrid rivalizarán con los latinos y aparecerán las pistolas y los machetes.