Europa Press ¿Qué se le ha perdido a la Generalitat en Libia?
El Govern incluye el país del Magreb en su red de embajadas pese a que es un estado fallido
El gobierno catalán ha decidido incluir a Libia entre sus objetivos en materia de política exterior. La última reunión en el Consell Executiu del pasado martes aprobó incluir tres nuevos países (Grecia, Libia y Egipto) en su red de ‘embajadas’.
La Generalitat justificó la decisión por tener presencia institucional en “todo el Norte de África, con el objetivo de reforzar la apuesta, el Mediterráneo como ámbito de actuación natural de la acción exterior catalana”. La Delegación del Gobierno en el Norte de África añadirá Libia y Egipto a su ámbito de actuación.
Libia es, sin embargo, un estado fallido desde el derribo y posterior muerte del dictador Muamar el Gadafi. Reino Unido, entonces bajo la presidencia de David Cameron; y Francia, con Nicolas Sarkozy, aprobaron los bombardeos por presión de la opinión pública. Sobre todo del intelectual francés Bernard-Henri-Lévy.
La situación generó en un vacío de poder con dos facciones enfrentadas. Existen también amplias partes de territorio bajo control salafista. En Italia preocupa la inestabilidad política por su cercanía geográfica. El propio Ministerio español de Asuntos Exteriores considera que la situación es “inestable y volátil”.
La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, a pregunta de e-notícies justificó la decisión por “criterios objetivos” y aseguró que se habían hecho “informes”. Plaja afirmó que era necesario ampliar la presencia catalana porque Libia “está en fase de reconstrucción política y económica”.
Plaja afirmó que era necesario ampliar la presencia catalana | Xavier Rius
A finales de junio, el Govern también puso en marcha la delegación en Estados Andinos con sede en Bogotá (Colombia). La portavoz argumentó entonces la decisión por su “interés estratégico” y por contribuir a “consolidar el proceso de paz”. El mismo día pusieron en marcha el proceso para seleccionar al futuro delegado.
En el país ya se encuentra el exconseller Xavier Vendrell, hombre de confianza del presidente Petro. También algún otro militante de Esquerra del Baix Llobregat, de la confianza de Oriol Junqueras.
Plaja recordó que “el Govern tiene más delegaciones en el exterior que nunca” con 21 en 70 países. La recuperación de las ‘embajadas’ ha sido uno de los objetivos de Pere Aragonès porque fueron cerradas con la aplicación del 155.
La entonces vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría se jactó en abril de 2018, en plena campaña, que el Diplocat estaba “en liquidación”.
El Consell Executiu aprobó igualmente el martes cambiar la sede de la delegación en el África meridional de Pretoria, la capital sudafricana, en Johannesburgo, la capital económica, por motivos “estratégicos, institucionales, demográficos y económicos”.
“Esta modificación es un paso más en la estrategia de despliegue de la red de delegaciones que está llevando a cabo el Departamento de Exteriores y que permite que la representación institucional del Gobierno supere ya los 70 países en todo el mundo”, destacaba la nota oficial.
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