El PSC impone su relato en el Govern frente a las presiones de ERC

El President de la Generalitat, Salvador Illa, ha hecho balance este lunes del 2024 en un año muy especial para él. Después de tres elecciones ganando, el PSC consiguió por fin acceder al gobierno en Cataluña. Con su presidencia, Illa puso en marcha el plan de normalización institucional después de diez años de gobiernos procesistas.

Illa ha aprovechado el balance de 2024 para imponer su relato ante las últimas presiones ejercidas desde ERC. El presidente del gobierno catalán ha hablado de “cambio de etapa en Cataluña”, haciendo énfasis en la voluntad “de los catalanes”. 

Además, ha lanzado un mensaje de optimismo afirmando que “Cataluña lo tiene todo para que nos vaya bien”. Ahora el PSC busca la estabilidad necesaria para desarrollar su obra de gobierno de la mano de sus socios preferenciales.

A la espera de aprobar lo antes posible los presupuestos de 2025, Illa también ha hecho guiños a ERC y los Comunes. También ha tenido un gesto hacia Carles Puigdemont, con la mirada puesta en la turbulenta situación de Pedro Sánchez.

En busca de la estabilidad

El Govern  ha aprobado este lunes el plan de gobierno para aprobar 260 medidas en los próximos años. Se trata de una ambiciosa hoja de ruta que contempla la aprobación de 134 iniciativas legislativas solo para el año que viene. 16 de ellas están orientadas a cumplir los acuerdos de investidura adquiridos con Esquerra y Catalunya En Comú.

Con el ánimo de contentar a sus socios, Illa ha hecho hincapié en la vivienda, los servicios públicos y la financiación singular como ejes vertebradores. También ha mencionado la seguridad, una de las carpetas más urgentes del nuevo gobierno.

El sistema de financiación singular tiene que servir precisamente para mejorar los servicios públicos. Illa ha hablado de la “prosperidad compartida” que su gobierno quiere generar en esta legislatura, con redistribución de la riqueza. 

Pero además de más recursos, ha insistido en la eficiencia de la gestión como condición para alcanzar esa prosperidad. El PSC quiere abrir una etapa reformista que llevarán a cabo los comités de experto que ha creado. En sus manos están las ambiciosas reformas en sectores como la administración, la educación, la sanidad y los servicios sociales.

Visita a Carles Puigdemont

Los últimos movimientos del Govern habían debilitado sus relaciones con sus socios, especialmente con ERC. Los republicanos se encuentran en una posición incómoda. Necesitan seguir sosteniendo un gobierno que impone un relato de cambio de ciclo perjudicial para la imagen de Esquerra ante los votantes independentistas.

La entrada de la Guardia Civil y la Policía Nacional en el sistema de emergencias catalán (112) fue la gota que colmó el vaso. El portavoz de ERC en el Parlament, Josep Maria Jové, amenazó con retirarles el apoyo si no había una rectificación. El PSC acabó rectificando, con la sensación de que el Govern cedía a las presiones de Esquerra.

Con esto y con el anuncio de medidas sancionadoras para los propietarios de viviendas, el Govern pretende allanar la negociación de los presupuestos. Al mismo tiempo, necesita marcar relato para demostrar quien gobierna. Y esto es lo que ha hecho Illa este lunes.

El President de la Generalitat también ha abierto la puerta a reunirse con Carles Puigdemont en Bélgica para rebajar la tensión con Junts. Asume así su papel de mediador en la crisis abierta entre el Gobierno de Pedro Sánchez y Junts. Sabe que su futuro depende también de la estabilidad del Gobierno español y su supervivencia.