Pilar Rahola, de la euforia al lamento en nueve meses: ‘Nos ha tomado el pelo’
Incluso la más ferviente defensora de Carles Puigdemont empieza a ver grietas en su estrategia
En plena tormenta sobre Carles Puigdemont por su acuerdo con el PSOE, Pilar Rahola fue de las pocas que salió decididamente en su defensa. Lo hizo a través de varios vídeos en los que, en un tono eufórico, hablaba de “acuerdo histórico” y aseguraba que Puigdemont tenía a Pedro Sánchez “cogido”. Nueve meses después, incluso la más ferviente defensora del expresident ve grietas en su estrategia de pacto con los socialistas.
En su columna periódica en El Nacional, Pilar Rahola arremete contra Pedro Sánchez por lo que considera una traición a su palabra. “Queda claro que nos está tomando el pelo con el tema del catalán en Europa”, lamenta ahora, y que “sencillamente no tiene palabra”. Habla de “falta de escrúpulos” para definir a Sánchez, y destaca su capacidad de incumplir las promesas, desdecirse de lo dicho el día anterior, cambiar de criterio sin ninguna dificultad y mantenerse en el poder a toda costa.
La estrategia de Rahola es clara, y consiste en presentar a Pedro Sánchez como un trilero para no tener que reconocer que Puigdemont se equivocó. Aunque para eso están sus lectores, que se sorprenden de su ingenuidad y advierten de que quizás los que toman el pelo son los suyos. “¿Ahora te das cuenta?”, le comentan en relación a Pedro Sánchez, y es que cuando Junts pactó con el PSOE, mientras Rahola lanzaba salvas al aire, ya hubo muchos que advirtieron de que esto iba a ocurrir.
Bochorno de Pilar Rahola
El vídeo de Pilar Rahola tras el acuerdo por el catalán en Europa probablemente es ya probablemente el que peor ha envejecido. La tertuliana habló de “día histórico” y vaticinó que el catalán había llegado a Europa para quedarse. Dejándose llevar por la euforia, dijo que “el Gobierno español sabe que tiene que hacerlo si quiere la investidura, los presupuestos y todo lo que tiene que venir”, y alabó la “fortaleza de Puigdemont” que “se ha cuadrado”.
Ahora reconoce que el PSOE les ha tomado el pelo con el catalán en Europa, aunque evita hacer autocrítica por haberse dejado engañar. “De Pedro Sánchez se podrían escribir hasta libros”, dice una independentista, “pero lo de nuestra clase política clama al cielo”. De hecho recuerdan que primero engañó a ERC con la mesa de diálogo y luego a Junts con el catalán en Europa, y recuerdan aquel refrán que dice “si me engañas una vez la culpa es tuya, pero si me engañas dos…”.
Pero más allá del bochorno de Pilar Rahola, el contraste entre lo que decían en septiembre y lo que ocurre ahora deja en mal lugar a Junts per Catalunya. Primero, porque dijeron que el catalán en Europa no estaba vinculado a la investidura cuando luego se demostró que sí. Segundo, porque luego se ha demostrado que el PSOE nunca ha tenido una voluntad real de presionar para que se acabara implementando.
Puigdemont en el alambre
Lo peor para Puigdemont es que le comparen con Junqueras, porque significa que va camino de seguir los mismos pasos que ERC. La realidad es que los partidos procesistas pierden cada vez más apoyos y que la crisis de confianza parece un proceso irreversible. Incluso la figura de Puigdemont, que hasta hace poco parecía intocable, ha sido insuficiente para que Junts ganar las elecciones al PSC.
Junts teme que el declive procesista escriba un nuevo capítulo el próximo 9 de junio, en las elecciones europeas. El abstencionismo se está movilizando en las redes sociales para asestar un nuevo golpe a ERC y Junts, a quienes desde luego no ayudan frustraciones como la del catalán en Europa. Cabe recordar que el propio Puigdemont dijo que dejaría la política si no era investido, pero a estas alturas ya nadie confía en su palabra.
“El que no ha tomado el pelo es Carles Puigdemont”, le dice un independentista indignado a Pilar Rahola, “tú no lo admitirás porque es amigo tuyo, pero si eres sincera contigo mismo lo sabes”. Este es probablemente el mensaje que mejor define la situación de Pilar Rahola. En nueve meses ha pasado de la euforia a la frustración, quizás porque es ya de las pocas que se deja engañar por lo suyos.
Más noticias: