Nuevo golpe judicial al entorno de Carles Puigdemont
Junts acusa al PSOE de utilizar a la fiscalía
La fiscalía del Tribunal Supremo ha solicitado al juez instructor del procés Pablo Llarena que reactive la euroorden contra Lluís Puig. El exconseller de Cultura está procesado por desobediencia y malversación por el referéndum del 1 de octubre de 2017. Huyó a Bélgica junto a Carles Puigdemont, y ahora forma parte de su núcleo duro.
El juez Llarena dejó sin efecto las órdenes de detención tras la reforma del código penal que suprimió la sedición y modificó la malversación. Los fiscales piden ahora la reactivación de la euroorden “por si fuera necesario tramitar la solicitud de extradición”.
El entorno de Junts ha estallado contra la petición de la fiscalía, a la que acusan de estar controlada por el PSOE y querer aumentar la presión en el marco de las negociaciones por la investidura. El propio Carles Puigdemont ha reaccionado cargando contra el poder judicial español: “Son tan previsibles que casi es una tradición”.
Nueva solicitud al juez Llarena
El juez Pablo Llarena rechazó el pasado mes de enero reactivar la euroorden de detención contra Lluís Puig. Lo hizo motivado por el cambio de las condiciones de la justicia europea para emitir este tipo de órdenes. La posterior modificación de los tipos penales en España han disuadido al magistrado de dar este paso.
Los fiscales entienden que el escenario ha cambiado y piden al juez instructor reactivar el procedimiento ante la posibilidad de una extradición. Hicieron lo mismo con Puigdemont y Comín tras la retirada de su inmunidad parlamentaria. En el entorno independentista creen que se trata de una nueva medida de presión.
La petición en el caso de Puigdemont y Comín se produjo tras los resultados electorales que dejaba la gobernabilidad de España en manos de Junts. La solicitud en el caso de Lluís Puig se produce en el marco de las negociaciones de investidura. ¿Casualidad?
Junts estalla contra la petición
En Junts lo tienen claro, y acusan al PSOE de controlar a la fiscalía para aumentar la presión sobre Junts en el marco de las negociaciones. “El día después de la Diada, nunca fallan, la Fiscalía y la cúpula judicial siempre salen a recordarnos que el ‘A por ellos’ sigue vigente”, ha tuiteado el secretario general de Junts, Jordi Turull.
También la presidenta del partido, Laura Borràs, se ha pronunciado al respecto. “Los fiscales del Tribunal Supremo no dejan de hacer política al servicio de la unidad de España”, ha tuiteado. Tanto ellos como Carles Puigdemont y otros líderes destacados del partido han mostrado su apoyo a Lluís Puig.
El exconseller de Cultura, ahora prófugo de la justicia, es uno de los trece miembros del Govern del Consell de la República. Es, por lo tanto, una de las personas que integran el círculo más cercano de Puigdemont. La petición de la fiscalía se lee como un nuevo golpe a Waterloo para ablandar las posiciones de Junts de cara a la investidura.
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