Marta Rovira con chaqueta roja hablando frente a dos micrófonos.
POLÍTICA

Marta Rovira, señalada directamente por los carteles contra Ernest Maragall

Filtran mensajes de la secretaria general pidiendo 'sacar provecho' de la estructura B del partido

El escándalo de los carteles de ERC mofándose de Ernest Maragall y el Alzheimer suma otro capítulo. Según han avanzado esta mañana El Nacional y Catalunya Ràdio, la secretaria general de Esquerra, Marta Rovira, pidió sacar provecho de los carteles y activar la estructura B del partido. 

Una mujer con cabello rizado y corto, vestida con un saco rojo y una camiseta blanca, hablando frente a dos micrófonos.

Recientemente se conoció que los carteles anónimos con el mensaje “fuera el Alzheimer de Barcelona” y la imagen de los hermanos Maragall salieron desde dentro del propio partido. Fue en plena campaña de las municipales, en las que Ernest Maragall encabezaba la candidatura de ERC. Este caso de falsa bandera destapó la existencia de una estructura paralela dedicada a la guerra sucia contra sus adversarios políticos.

Tras conocerse el escándalo, la cúpula del partido prometió una investigación para esclarecer los hechos. Aunque sigue sin conocerse quién ordenó la humillante campaña, unos mensajes privados revelan ahora que Marta Rovira era conocedora de los hechos. Y que, de hecho, la secretaria general del partido pidió sacar provecho de los carteles para "arrancar votos de solidaridad".

Los mensajes que comprometen a Marta Rovira

El Nacional ha sacado a la luz las conversaciones privadas que mantuvieron dirigentes de ERC a raíz de la aparición de los carteles contra Ernest Maragall. En uno de esos mensajes, Marta Rovira afirma que “es una campaña tan agresiva que si la denunciamos públicamente quizás arrancamos unos cuantos votos de solidaridad”. Al ver la imagen de los carteles, Marta Vilalta dijo que era “muy fuerte” y Marta Rovira que había que “denunciar” los hechos.

Eso sí, la secretaria general vio en la campaña una oportunidad para sacar rédito electoral y “arrancar” unos cuantos votos. 

De este mensaje no se deduce que Rovira tuviese conocimiento de que los carteles salían desde dentro de su propio partido. Pero otro mensaje sí demuestra que la secretaria general era conocedora de la existencia de una estructura paralela de agitación contra sus rivales. Meses después del escándalo de los carteles pidió a su círculo próximo cómo iba la campaña B, y pidió activarla para pasar por allí algunas acciones del partido.

En esta conversación aparece también Sergi Sabrià, que presentó su dimisión tras ser señalado como uno de los principales responsables de la estructura paralela. La información destapada ahora demuestra no solo que Marta Rovira y su entorno conocían la existencia de la estructura B del partido, sino que esta siguió funcionando incluso después del escándalo de los carteles contra Ernest Maragall. 

Lucha de poder en ERC

Una vez más, la cúpula de ERC ha quedado retratada. La información revelada hoy revela que Marta Rovira mintió cuando, una vez destapado el escándalo, negó que en ERC hubiera una estructura B. Según desvela El Nacional, Marta Rovira y otros dirigentes organizaban acciones y encargaban su ejecución a personas que después cobraban a través de empresas vinculadas a la formación.

La información deja aún más tocada la figura de Marta Rovira, que era hasta hace nada el principal activo político de ERC junto a Oriol Junqueras. Cabe recordar que la secretaria general del partido anunció recientemente su intención de no seguir al frente del cargo tras el congreso nacional previsto para el próximo mes de enero. Sin embargo, estaría fraguando una candidatura alternativa a la de Oriol Junqueras para seguir manejando los hilos del partido desde la sombra.

Las primeras reacciones no se han hecho esperar, y personalidades de la propia ERC ponen el grito en el cielo. "Avergonzada del que ha sido, es y será mi partido como proyecto ideológico", ha afirmado Dolors Bassa, señalando a "quienes proponían y realizaban acciones de este tipo".

Pero Dolors Bassa también critica a quienes "para ganar un congreso filtran a la prensa mierda contra los demás". En realidad lo que esta información desvela es una lucha descarnada por el poder dentro de ERC, de consecuencias imprevisibles.

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