Un periodista informa desde Berlín mientras se muestra una celebración de AfD y una presentadora en un estudio de televisión.
POLÍTICA

Los malabares de TV3 para maquillar los resultados de las elecciones en Alemania

La televisión pública catalan celebra el 'freno a la extrema derecha' pese al hundimiento general de la izquierda

La derecha radical sigue recortando terreno a la socialdemocracia alemana, en la carrera de fondo que llevan meses disputando para hacerse con el poder. El SPD de Olaf Scholz ha conseguido imponerse por la mínima a Alternativa por Alemania (AfD) en las elecciones regionales de Brandemburgo. La concentración del voto antiderechista ha beneficiado al partido socialdemócrata, que aun así ha ganado por un margen muy ajustado.

De hecho, el presidente de la región, Dietmar Woitdke, pidió calma al conocer los resultados por el ajustado margen en la victoria del SPD. En todo caso, esto permite al canciller Scholz tomar un poco de aire en pleno proceso de declive de su partido. Las encuestas hablan de un retroceso de las izquierdas y de un ascenso de la derecha en las elecciones generales previstas para el año que viene.

Una multitud de personas se manifiesta con numerosas banderas de Alemania y pancartas de un partido político.

Alternativa por Alemania ha obtenido el 29,6% de los votos y 30 diputados, frente al 30,7% de los sufragios y 32 escaños del SPD. Se trata de un nuevo golpe de efecto de los nacionalistas alemanes, que ya dieron la sorpresa recientemente en las elecciones de Turingia y Sajonia. Esto demuestra la tendencia al alza del AfD, y los problemas de un Olaf Scholz que ha tenido que endurecer sus políticas migratorias para resistir.

TV3 celebra el 'freno a la extrema derecha'

La realidad es que el SPD ha conseguido salvar en el último minuto y por la mínima un feudo histórico donde gobierna desde hace 34 años. Con todo, los resultados han sido celebrados en TV3, que ha hablado de “freno a la extrema derecha”. Un análisis de brocha gorda que no tiene en cuenta el batacazo de otras izquierdas, como el Die Linke, ni la subida de otros partidos antiinmigración como el de Sahra Wagenknecht. 

El BSW, escisión de Die Linke, ha escalado hasta la tercer posición con un discurso contra la inmigración ilegal y la ayuda a Ucrania en la guerra contra Rusia. Es llamativo que el partido de Sahra Wagenknecht haya conseguido un 13,1% de los sufragios y 14 diputados, mientras el Die Linke ha quedado fuera de la cámara con un 2,9% de los votos. Hay un claro cambio de tendencia en Alemania, que sin embargo TV3 trata de maquillar con el mantra del “freno a la extrema derecha”.

Una mujer hablando en un podio con un micrófono y un fondo rojo con texto en alemán.

La izquierda alemana está sufriendo las consecuencias de la crisis económica y social que lleva años planeando sobre el país. Los partidos tradicionales -como el SPD y el Die Linke, pero también la CDU- están siendo castigados por cuestiones como la guerra de Ucrania y el buenismo con la inmigración. En cambio, los nuevos partidos que plantean una ruptura con el viejo establishment están recibiendo un apoyo masivo.

Los medios catalanes, al servicio del relato

TV3 lleva tiempo obsesionada con la extrema derecha, y sus análisis giran siempre en torno a este enfoque. Su deriva ideológica al servicio del poder en Cataluña, el canal público se ha convertido en punta de lanza de la izquierda por la imposición de su relato. Eso hace que se analice la actualidad política europea siempre desde el punto de vista del “freno a la extrema derecha”.

Pero su sectarismo no se detiene ahí, porque ha sido acusada reiteradamente de favoritismo hacia regímenes como el de Venezuela o Hamás en Palestina. Por no hablar de la sobrerrepresentación de las minorías que reclaman su cuota de pantalla en la televisión woke por excelencia. En este caso, la política exterior sirve para justificar los propios intereses en Cataluña, donde también llevan a cabo una cruzada contra lo que despectivamente denominan la "extrema derecha".

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