Laura Borràs avala el discurso de expulsar a inmigrantes reincidentes

El debate de la inmigración ha provocado un nuevo cisma en Junts per Catalunya. El partido de Carles Puigdemont lleva tiempo debatiéndose entre si seguir abrazando el buenismo de ERC y la CUP, o romper el tabú en temas como la inmigración. En el trasfondo está también el miedo a Aliança Catalana, el partido de Sílvia Orriols. 

Uno de los sectores en la disputa dentro de Junts es el que encabeza la presidenta del partido, Laura Borràs. Ella fue una de las que encabezó la rebelión de las bases contra la decisión de la dirección de apoyar el cordón sanitario a Sílvia Orriols en Ripoll. Ahora, Borràs toma también partido en el debate migratorio.

Los alcaldes de Junts en el Maresme respaldaron al alcalde de Calella en su petición de expulsar a los inmigrantes con delitos reincidentes. Esto ha revolucionado el debate sobre la crisis migratoria en Cataluña. Cada vez se hace más palpable la distancia entre el Govern y la izquierda con el hartazgo de los ciudadanos.

El mensaje que ha retuiteado Laura Borràs

La cuenta de Manuel García en X ha planteado una reflexión sobre el debate migratorio, y Laura Borràs lo ha retuiteado. Viene a decir que la relación entre inmigración y delincuencia es “un problema real”. Y que hay que afrontarlo para evitar que la extrema derecha lo utilice para alimentar el odio y la xenofobia.

“La izquierda ha anatemizado este debate dejando el terreno abonado a los ultras para que cale su discurso populista que señala a un colectivo vulnerable como el enemigo”, dice el mensaje. “Ahora se plantea la problemática de la delincuencia multirreincidente. Ha faltado tiempo para eludir el debate acusando a sus promotores de subirse al carro del populismo y la xenofobia”, añade.

Sin embargo, advierte de que “el problema es real, especialmente en algunas localidades y barrios”. A su entender, el problema de la multirreincidencia está en que, tras ser detenidos por la policía, los delincuentes entran el juzgado por una puerta y salen a la calle por otra. “Dejando claro que la condición de delincuente no al otorga una raza, origen, religión o clase social”, plantea una última reflexión.

Expulsión de los multirreincidentes extranjeros

Para acabar con la impunidad de los multirreincidentes, defiende la cárcel para nacionales o extranjeros comunitarios, y cárcel y expulsión para extranjeros no comunitarios. “En paralelo”, añade, “se debería abordar de forma realista el necesario debate sobre la marginación, la exclusión social y la reinserción”. Además, pide tomar “medidas eficaces” para combatir la gran delincuencia económica.

En localidades como Calella y Malgrat de Mar la población se ha multiplicado en cuestión de días y ha habido un preocupante repunte de la violencia y la inseguridad. Las autoridades aseguran estar desbordadadas y los vecinos están cansados de los discursos buenistas. En Junts ha vuelto a estallar el debate, y cada vez hay más dudas sobre la posición a tomar.