El Frente Obrero pide paso

Hace unos meses, mucha gente apenas sabía de la existencia del Frente Obrero (FO). Ahora, a pesar de seguir siendo un actor político alejado de la primera línea mediática, es cada vez más conocido. Y este fin de semana, todos los grandes medios españoles se hicieron eco de la protesta que organizaron el sábado frente a la sede del PSOE en Madrid.

En los últimos 10 días, Ferraz se ha convertido en el escenario de multitud de protestas. La del Frente Obrero no fue la más numerosa de todas las que se han celebrado frente a la sede del PSOE. La Delegación del Gobierno cifró la asistencia en 200 personas, aunque claramente había más. Pero si algo demostró el partido de Roberto Vaquero en este acto es la capacidad de movilizar y organizar a sus militantes. 

Con simpatizantes y asociados llegados de toda España, el FO marcó músculo. No solamente se trató de un acto para protestar contra las concesiones de Pedro Sánchez a ERC y Junts. También se convirtió en una demostración organizativa del Frente Obrero. Decenas de banderas del partido, de España y también republicanas ondearon de forma casi coreográfica en una protesta visualmente impactante. 

Los cánticos y gritos contra el líder del PSOE no cesaron en ningún momento. “Perro de Marruecos y de Puigdemont, no eres socialista, eres un traidor” o “PSOE traidor, ni obrero ni español” fueron algunas de las consignas más escuchadas. 

Roberto Vaquero, megáfono en mano, reivindicó que “hoy hemos hecho una demostración de disciplina y de orden, pero esto no acaba aquí". Y dejó claro que "va a haber más movilizaciones y más organización combativa, revolucionaria y patriótica. Hemos venido para quedarnos”. 

Un partido que rompe los moldes establecidos

El Frente Obrero se ha erigido como un “movimiento revolucionario por y para la clase obrera” que apuesta por un proceso constituyente que acabe en una “República Popular y Federal encaminada al socialismo”. Eso sí, rechazan la clásica dicotomía derecha-izquierda. De hecho, siempre se han mostrado muy críticos con la izquierda institucional, desmarcándose en varios aspectos destacables.

Su rechazo a la Ley Trans, a las políticas del Ministerio de Igualdad o sus críticas a la descentralización de las competencias del Estado son solo unos ejemplos. Acusan a “la nueva izquierda” de no ser “capaz de identificar y enfrentar los problemas que afectan al país” y de “adoptar el posmodernismo ideológico” procedente de los Estados Unidos.

También su líder, Roberto Vaquero, siempre se ha mostrado muy crítico con las políticas migratorias que reinan en España y en Europa, marcando así distancias con el discurso buenista de la izquierda clásica. Se trata, pues, de un partido que rompe los moldes establecidos hasta ahora en la izquierda española. 

La estrategia del Frente Obrero para difundir sus ideas

Fuertes en redes sociales, su líder Roberto Vaquero ha sabido trazar una estrategia para que las ideas del Frente Obrero sean cada vez más escuchadas en diferentes altavoces mediáticos que hay en internet. Y le está dando resultados: un ejemplo es la entrevista que dio en el canal de YouTube de Wall Street Wolverine, que ya cuenta con más de 450 000 visualizaciones. Incluso Iker Jiménez, en su programa Horizonte, se hizo eco del proyecto del Frente Obrero. También el mismo Vaquero tiene su propio canal en YouTube, que ya tiene más de 200 000 suscriptores.

En las últimas elecciones generales se presentaron por primera vez. Consiguieron más de 45.000 votos y se convirtieron en la segunda fuerza extraparlamentaria que se presentó en toda España. Un resultado que, desde el Frente Obrero, definieron como “digno”. La próxima cita será, previsiblemente, los comicios europeos que se celebrarán en 2024. Será una prueba de fuego para ver la evolución de un partido que, poco a poco, va pidiendo paso en la política española.