Un Feijóo crecido retrata a Pedro Sánchez

Hoy arranca la segunda sesión del debate de investidura en el Congreso de los Diputados. En la primera, ayer, Alberto Núñez Feijóo demostró hechuras de presidente y puso de los nervios a un PSOE que escondió a su líder y optó por el exabrupto. El PP consigue así su objetivo de retratar a Pedro Sánchez.

Pocos esperaban el aplomo con el que el candidato popular defendió su investidura ante un PSOE desconcertado. Feijóo fue contundente contra la amnistía y la autodeterminación, pero también conciliador al presentar un proyecto de país de consenso con seis grandes pactos de Estado. 

Feijóo, hasta ahora discutido incluso dentro de su propio partido, despejó ayer las dudas sobre su liderazgo. Aunque dan por perdida la investidura, en Génova se desató la euforia. Creen que lo de ayer es el primer paso de su líder hacia la Moncloa y lo ven como una confirmación del éxito de su estrategia.

Discurso de hombre de Estado

La estrategia de la contención ha acabado dando resultados. Durante días, la dureza de Vox o de Ayuso y Aznar dejaron en evidencia la tibieza de un Feijóo que parecía verse arrastrado hacia la tentación del giro a la derecha. Sin embargo, en su equipo seguían creyendo en la estrategia de la contención.

Conscientes de la dificultad de conseguir la mayoría necesaria para la investidura, Génova diseñó un plan consistente en poner al PSOE contra las cuerdas. Feijóo desplegó ayer ese plan con seis grandes propuestas de consenso. Seis pactos de Estado para regenerar la democracia, recuperar la economía y superar el conflicto territorial.

La intención de los populares era retratar a un PSOE más preocupado por mantenerse en la Moncloa que por el bien común. La intervención dura y agresiva de Óscar Puente en lugar de Pedro Sánchez acabó realzando aún más el perfil presidencial de su adversario. El propio Feijóo lo tildó como el Club de la Comedia y señaló que “el PSOE ha llegado al zénit de su desprestigio como partido histórico de la democracia española”.

La sonrisa nerviosa de Sánchez

Feijóo puso encima de la mesa medidas para regenerar la democracia española, recuperar la economía y cohesionar la nación. Medidas de consenso como por ejemplo subir el salario mínimo, bajar los impuestos a las rentas medias y bajas y extender el Ingreso Mínimo a más familias. También ayudar a los emprendedores y flexibilizar los horarios laborales.

Muchas de estas medidas las podrían firmar el PSOE y Sumar, y esta era precisamente la intención del PP. Ofrecer un gran acuerdo de consenso que los partidos de la izquierda no pudieran rechazar sin ponerse en evidencia. La sonrisa nerviosa de Sánchez durante toda la sesión demostró el acierto de Feijóo.

Con su discurso de ayer, el gallego acorrala un poco más al sanchismo y sacude a los sectores del PSOE favorables a la gran coalición. El único impedimento sigue siendo Vox, a los que el candidato solo mencionó de pasada en un par de ocasiones. Incluso así, Abascal se rindió también al discurso del Feijóo “presidente”.