El dato que refleja la magnitud de la tragedia de Sumar y Podemos en Galicia

Las elecciones gallegas pueden haber dado la puntilla a una izquierda que sobrevivió al 23-J pero que sigue metida en una profunda crisis. Los gallegos han castigado duramente al PSOE, pero sobre todo a los partidos de la nueva izquierda. Una izquierda que llegó para transformar la realidad y ha acabado agotada en sus luchas internas.

Un dato revela la magnitud de la tragedia sufrida ayer por la formación de Yolanda Díaz y el partido de Pablo Iglesias. Con 28.171 votos, Sumar quedó por detrás de Vox aunque ninguno logró representación. En todo caso, la diferencia de cuatro mil votos entre uno y otro es importante porque Yolanda Díaz y Santiago Abascal rivalizan por el tercer lugar en la política nacional detrás de PP y PSOE.

Lo de Podemos es aún más preocupante, porque los morados han quedado en octavo lugar por detrás incluso del PACMA. Hay un dato que lo dice todo, y es que los animalistas han sacado 1.500 votos más que Podemos, que ha obtenido solo 3.854 sufragios. Se ahonda pues la crisis de la izquierda, a pocos meses de otro posible desastre que puede ser definitivo en las elecciones europeas.

Sumar y Podemos, al borde del desastre

Podemos fue cuarta fuerza con 51.630 votos en las elecciones gallegas de 2020, solo por detrás del PP, el BNG y el PSOE. En cuatro años ha perdido 47.776 votos, y se ha visto adelantado por Vox, Sumar y Pacma. “Vamos a seguir trabajando para transformar”, ha expresado la secretaria general del partido, Ione Belarra.

El batacazo confirma la descomposición de este partido que una vez fue alternativa y que ahora se consume en las peleas con el espacio de Sumar. Los ciudadanos ya no identifican a los líderes de Podemos como motor de transformación sino más bien como un obstáculo. La división de la izquierda les asemeja más a la casta que dijeron combatir, alejada de los problemas reales de la gente.

Si los resultados de Podemos son malos (solo les han votado un 0,26% de los electores), Sumar tampoco sale bien parado. Solo un 1,9% de los electores han optado por el partido magenta, pese a que Yolanda Díaz se presentaba como la gran alternativa de cambio. Se ha demostrado que presentarse a las elecciones fue una mala estrategia.

Se confirma que fue una mala idea

Durante la precampaña electoral se debatió sobre Podemos y Sumar debían concurrir a las elecciones, o tenían que inhibirse para concentrar el voto en el BNG. Finalmente decidieron presentarse, pese a estar enfrascados en una guerra que divide a la izquierda. Con la mayoría absoluta en un puño, la división ha acabado de dar el empujón final al PP de Alfonso Rueda.

La mala noticia para Sumar y Podemos es que la cosa puede ir aún peor en las próximas elecciones. Por delante está el reto de las elecciones vascas y las europeas, antes de los comicios catalanes. Más preocupante es la situación para Podemos, que parece haber perdido la batalla contra Sumar y se encuentra en plena crisis económica.