La CUP critica a Sílvia Orriols por haber informado de la detención de un maltratador

Nunca subestimes la posibilidad que tiene la política de sorprenderte. Y aún menos cuando es la CUP la que participa de esta política. Tras tantos años, ya estamos acostumbrados a las salidas de tono de los anticapitalistas, pero esta vez han propuesto superarse. Y es que la obsesión que tienen los cupaires contra Sílvia Orriols está llegando a unos niveles que rozan el esperpento, como demuestran el caso que os explicamos a continuación.

Era el pasado domingo cuando el Ayuntamiento de Ripoll anunciaba lo siguiente. “Detenido de madrugada un hombre con DNI español acusado de maltratar a su pareja[...]Hace 15 días, la Policía Local ya había emitido informe a servicios sociales recomendando la retirada de dos menores, hijas de la víctima, del domicilio familiar. Gracias a la rápida actuación de los agentes, se ha podido detener al presunto agresor”.

En líneas generales, cuesta pensar que una notificación como esta pueda generar algún tipo de polémica. Pero estamos hablando de Ripoll y el afán por criticar a Sílvia Orriols supera cualquier lógica. Dos días más tarde, la CUP daba un paso al frente para criticar y, ojo, “condenar” el comunicado emitido por el Ayuntamiento de Ripoll.

Los anticapitalistas de esta localidad actúan bajo la marca Alternativa per Ripoll. Y en un mensaje en sus redes sociales denunciaron la decisión de Sílvia Orriols de hacer esta comunicación. Según los cupaires, hay cuatro razones por las que “lamentamos y condenamos” el comunicado de la detención de un presunto maltratador no es correcto 

Para la CUP “dar la nacionalidad del agresor” es intolerable. Los cupaires ya criticaron hace unas semanas que el Ayuntamiento informara de la detención de un marroquí. Se quejaron de que solamente lo había hecho para señalar y estigmatizar a la comunidad magrebí. Ahora que el detenido tiene DNI español, tampoco lo ven bien. Cordura y sentido común quizás no, pero coherencia en sus delirios no se les puede negar. 

Desde la CUP también señalan que el comunicado “da pie a identificar la víctima y, por lo tanto, iniciar el proceso de victimización de la misma”. Otra crítica de los anticapitalistas es que, en la publicación, se ha etiquetado la cuenta personal de la alcaldesa, Sílvia Orriols. Por último, también ven intolerable que el mensaje “hable de violencia en el ámbito del hogar y no de violencia de género” y que, con él, se “expone a la víctima y a sus hijos al chismorreo y al control social”. 

No se puede negar la capacidad de la CUP de generar polémicas. Fácil no es y se les debe atribuir el mérito que les corresponde. Esta última sobre la comunicación de la detención de un presunto maltratador es de nota. Eso sí, no está claro que esta estrategia les sirva para poner en apuros a una Sílvia Orriols que continúa gobernando Ripoll sin demasiados sobresaltos.