El catalán no será oficial en la UE, pero Pedro Sánchez ya es presidente

Si se acuerdan, Carles Puigdemont puso varias condiciones para votar a Francina Armengol como presidenta del Congreso e iniciar así el diálogo para la investidura de Pedro Sánchez. Uno de ellos fue la oficialidad del catalán en la Unión Europea, aprovechando la presidencia española en el Consejo de la UE. Puigdemont y Junts per Catalunya se pusieron chulos y pidieron hechos comprobables para mantener las negociaciones. Sucedió en septiembre y volvió a pasar a finales de octubre, cuando Junts exigió "una fecha de aprobación definitiva" para hacer oficial el catalán en la Unión Europea.

Pues nada de eso. El ministro Albares quizás lo haya intentado, pero los 27 no votarán este martes la propuesta y se desvanece el compromiso del PSOE con Puigdemont. Pedro Sánchez ya no será el presidente del Consejo en la próxima reunión, de modo que sus capacidades de seducción se reducen, y mucho. Lo avanzaba el diari Ara y lo ha podido confirmar e-Notícies: el Gobierno no llevará a votación este martes la oficialidad del catalán. 

Este mismo lunes, el portavoz de Junts, Josep Rius, salía pidiendo más esfuerzos al PSOE y ha señalado al PP como responsable por "una campaña de desinformación". La única realidad es que Pedro Sánchez ha incumplido el primer acuerdo con Carles Puigdemont. Eso sí, lo ha hecho durar varios meses, para poder mantener así las negociaciones y ser investido otra vez presidente.

Al otro lado del tablero, Carles Puigdemont se ha dejado engañar quizás. Consciente que lo realmente importante -sobre todo en su caso personal- es la ley de amnistía, ha permitido al PSOE demorar la decisión hasta en tres ocasiones. Y no podrá negar que el ministro Albares no lo haya intentado: España propuso a los otros 26 estados miembros hacerse cargo de los gastos derivados, que subían a más de 100 millones de euros.

La nueva presidencia del Consejo de la UE será para Bélgica, que no está demasiado por la labor de mantener vivo el debate de la oficialidad del catalán. Sin ostentar la presidencia, Pedro Sánchez ya no tendrá el poder para decidir el orden del día y la cuestión del catalán se irá diluyendo con el paso de los meses.

En resumen, que Carles Puigdemont ve como su primera línea roja en la negociación se queda en nada, pero Pedro Sánchez ya ha sido investido otra vez presidente del Gobierno. Y esta vez con sus votos. Como dirían en Twitter, "You have been PSOED".