Aumenta el adoctrinamiento y la propaganda yihadista en España

20 de octubre, la Policía Nacional detiene a cuatro jóvenes en Cataluña, Madrid y Andalucía por preparar atentados en España. Tres días después arrestan en Melilla al conocido como “mayor reclutador yihadista de Eruropa” en una macrooperación antiterrorista. Desde entonces se suceden las detenciones, hasta la última, el pasado 6 de diciembre en Madrid, con un imam que radicalizaba menores. 

Los servicios de inteligencia españoles y la policía están preocupados. La actividad de captación y adoctrinamiento se ha disparado desde el pasado 7 de octubre, tras el atentado terrorista de Hamás contra Israel. inquieta sobre todo la radicalización de personas muy jóvenes, que pueden actuar como lobos solitarios en posibles atentados.

Este lunes se ha reunido la mesa de seguridad para evaluar el nivel de alerta terrorista y coordinar un plan especial de protección en las fiestas navideñas. Pero en el CNI también tienen claro que la amenaza no desaparecerá tras las Navidades. España, como la Unión Europea, se encuentra en un proceso de rápida radicalización islamista.

Llamada a la yihad global

La Policía Nacional realizó en un solo mes 31 detenciones en el marco de operaciones antiyihadistas. Aunque no todas estaban conectadas, los servicios de inteligencia lo relacionan con la llamada de líderes islámicos a la “yihad global” tras la ofensiva militar en Gaza. Daesh y Al Qaeda están detrás del aumento de la propaganda islamista.

En muchos casos, se trata de líderes religiosos que ejercen tareas de proselitismo y adoctrinamiento a través de las redes sociales. El objetivo suele ser siempre personas muy jóvenes que experimentan una “radicalización exprés”. En algunos casos, la policía ha interceptado la fabricación de explosivos para la perpetración de atentados.

Esto se suma a la presencia en suelo español de varios excombatientes yihadistas en Síria e Irak. Además, los servicios de inteligencia están muy atentos a la posible entrada de yihadistas en las sucesivas avalanchas migratorias en Canarias y el sur de España. Una bomba de relojería que podría estallar en cualquier momento.

Gobierno y oposición, divididos

España se encuentra en el nivel 4 reforzado de alerta antiterrorista. Esto significa que no ha alcanzado aún el nivel máximo (5), pero que Interior ha reforzado la seguridad con más presencia policial y más coordinación. Eso sí, Gobierno y oposición no han encontrado de momento la unidad deseable para esta situación.

La oposición ha hecho varios llamamientos a la ciudadanía para estar prevenido ante un posible ataque terrorista. El Gobierno ha acusado a PP y Vox de crear alarmismo. Este lunes, el ministro Marlaska ha reconocido el riesgo de un atentado inminente en España, pero ha llamado a la tranquilidad.

El discurso del Gobierno español contrasta con el mensaje de seria preocupación que lanzan las autoridades europeas. Los últimos atentados en Francia han vuelto a reavivar el miedo a una oleada de ataques yihadistas en suelo europeo. España vuelve a estar en el epicentro de esta amenaza, como lo demuestra el aumento de la actividad policial antiterrorista.