Todos los romances de Rosa Peral en la cárcel tras su relación con Albert López

Tras la confesión de Albert López sobre su participación en el crimen de la Guardia Urbana, muchos se preguntan en qué lugar queda Rosa Peral. ¿Podría ser inocente? No cabe duda que lo acontecido recientemente ha dado un vuelco en el caso del asesinato de Pedro Rodríguez. 

No obstante, en este punto, vamos a hacer un breve repaso de todos los romances de Rosa Peral tras su relación con Albert López. Y es que la vida de la catalana en la cárcel no ha sido un camino de rosas. Rosa Peral se ha visto envuelta en varios conflictos amorosos. 

Todos los romances de Rosa Peral tras su relación con Albert López

Los investigadores del caso consideran a Rosa Peral una persona "egoísta y con poca tolerancia a la frustración". Su dureza y su falta de empatía es lo que más destacan en ella. Según cuentan, su carácter le ha ocasionado problemas en la cárcel, pero también fuera.

Ingresó en la cárcel en mayo de 2017 y, durante estos años, ha sido trasladada y expulsada por protagonizar varios conflictos. Según La Vanguardia, la asesina ha seguido la misma trayectoria que cuando estaba en libertad. Ha sido la protagonista de varios conflictos entre las reclusas, motivos por los cuales ha tenido que ser trasladada.

En otra ocasión, aseguraron que el traslado de Brians 1 se forzó para evitar que fuera agredida por otras internas, ya que "trastocaba el equilibrio y la paz de la cárcel".  Los vínculos intensos que mantuvo en la cárcel fueron determinantes para tomar la decisión.

De hecho la directora aseguró que "creaba vínculos intensos con las internas del grupo penitenciario, grupos cerrados que duraban poco tiempo. Cuando la relación entre estas internas se rompía, se creaba un alto nivel de hostilidad entre ellas". 

La vida amorosa de Rosa Peral antes de la cárcel

La realidad es que Rosa Peral se ha convertido en una de las asesinas más mediáticas. Mató y calcinó a su pareja, Pedro Rodríguez, junto a su compañero y amante Albert López. Todos ellos formaban parte del cuerpo de la Guardia Urbana de Barcelona.

No obstante, Rosa Peral habría sido infiel mucho antes de entrar en el cuerpo policial. Antes de entrar en el cuerpo trabajaba como camarera en una discoteca y, según publicó Metrópoli Abierta, se acostaba con muchos de sus clientes. Un hecho que no cambió cuando entró en el cuerpo.

Con 23 años, tuvo una relación con Óscar, un subinspector de la Guardia Urbana, mientras mantenía una relación con Rubén, Mosso d'Esquadra, con quien se casó y tuvo sus dos hijas. Todo demuestra que era incapaz de mantener una relación monógama. 

Su romance con Rubén terminó a causa de su infidelidad con Pedro Rodríguez, agente de la Guardia Urbana. A este también le fue infiel, concretamente con Albert López, su aliado para cometer el asesinato.