Primer plano de Xavier Grasset con gafas y barba frente a un edificio con el logo de TV3.
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Sorpresa mayúscula en TV3 con Xavier Grasset y ‘La Selva’: nadie lo esperaba

El giro inesperado que ha tomado el show de Grasset al captar la atención de un público cada vez más joven

Xavier Grasset, un auténtico veterano de la televisión catalana, sabe bien cómo adaptarse a los cambios y a los gustos del público. Desde su inicio, La Selva de TV3 ha sorprendido con su mezcla desenfadada de entrevistas, actualidad y un toque de humor. Sin embargo, su éxito no ha sido una línea recta: han tenido altos y bajos que mantienen a los espectadores y críticos atentos.

Esta vez, La Selva ha dado un salto inesperado en las audiencias, marcando un cambio drástico que ni los expertos vaticinaban. Con cada emisión, el formato demuestra que sigue siendo capaz de captar la atención de distintos grupos de edad. Pero lo que realmente ha captado la atención es el inesperado repunte de la audiencia esta semana.

Hombre con gafas y barba, vestido con una chaqueta verde claro y camisa naranja, sentado frente a un fondo de árboles.

El ascenso en las audiencias

La semana pasada no fue tan prometedora, pues el programa apenas alcanzó un 8,9% de cuota y 90.000 espectadores. Los números parecían indicar un declive progresivo, especialmente después de haber registrado un repunte de 10,9% la semana anterior, con 115.000 personas sintonizando. Estas variaciones constantes preocupaban a muchos, dado que un descenso continuo podría amenazar la estabilidad del formato.

Esta semana la historia cambió por completo, contra todas las predicciones, La Selva registró un impresionante 18,1% de cuota de pantalla, capturando a 267.000 espectadores. Este salto se traduce en un récord para el formato y refleja el interés del público. Especialmente entre los de 25 a 44 años y los mayores de 64, que alcanzaron una cuota del 23,2%, informa el analista Rocco Steinhäuser.

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Un programa diferente

Con una duración de casi tres horas en esta última emisión, La Selva no es un talk show común. Grasset ha conseguido crear un espacio en el que se mezclan temas de la vida cotidiana, cultura y tendencias actuales, evitando las tradicionales tertulias políticas. Este enfoque más relajado y abierto resulta en una conversación fluida, natural y accesible para todos.

Un grupo de personas sentadas en un set de televisión con un fondo de ladrillos y ventanas grandes, conversando alrededor de una mesa de centro con una base de madera y una lámpara verde.

La popularidad de La Selva esta semana muestra que el programa de Xavier Grasset aún tiene mucho por ofrecer. A veces, el secreto de mantener al público enganchado está en sorprender sin perder la autenticidad, y en eso, Grasset parece ser un verdadero experto.

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