El problema exacto que Leonor tiene en los dientes y que Letizia quiere resolver

Leonor deja atrás un mes lleno de acontecimientos significativos que nunca olvidará. La princesa ha demostrado que es capaz de asumir la responsabilidad del trono, tal como juró la semana pasada en las Cortes. En estas apariciones públicas ha destacado, además, un cambio en su dentadura, y es que Leonor luce una sonrisa diferente.

Fue el año pasado cuando, tras la pandemia y la retirada de las mascarillas, llamó la atención en Leonor la ausencia de los colmillos superiores. Mucho se ha hablado hasta ahora sobre la ausencia de dichas piezas, algo que quedaba en evidencia cuando la joven sonreía. En imágenes de los años previos al Covid, la hija de Felipe VI todavía conservaba los colmillos de leche.

Un experto analiza el tratamiento al que se habría sometido Leonor

Se comentó que los caninos no erupcionaban debido a que los tenía incluidos en el paladar. Ahora ha sido el odontólogo y ortodoncista Javier Manso Mora quien se ha pronunciado sobre las informaciones publicadas al respecto. El especialista reconoce haber leído en diferentes artículos "que no se habían formado unos dientes y que estaban con ortodoncia para luego ponerle un implante".

Las imágenes de estas últimas semanas han dejado ver que Leonor lleva brackets en los colmillos. Según la teoría del doctor Manso, finalmente a Leonor sí se le han formado dichas piezas. Lo que le han hecho es "una tracción", es decir, aplicar una fuerza constante en el diente para moverlo gradualmente hacia su posición correcta.

El hecho de que lleve este tipo de ortodoncia confirma que no se trata de un implante, pues "a un implante no le sueles poner brackets", explica Manso. Así, se confirma la teoría del citado odontólogo que considera que finalmente Leonor luce sus propios colmillos sin haber necesitado recurrir a los implantes.

Si bien hasta la fecha desde la Casa Real no se han referido en ningún momento a dicho tratamiento dental, lo cierto es que la princesa ha experimentado un notable cambio. Se comentó que podría tratarse de una agenesia hereditaria, una enfermedad que consiste en la inexistencia o falta de crecimiento de uno o más dientes por ausencia de tejido primordial.

En caso de que dichas piezas no se hubieran formado, habrían tenido que recurrir a los implantes. Un tratamiento que hubiera supuesto 'abrir' esos espacios y ubicar las piezas. Una opción delicada y que no está aconsejada en pacientes menores de 18 años.

Leonor finalmente no habría tenido que recurrir a un tratamiento con implantes

Según parece, la reina estaba preocupada por cómo evolucionaría el problema en la dentadura de la heredera. Según expertos en odontología, la ausencia de los colmillos podría haber afectado a la funcionalidad de la boca de Leonor. En concreto a las funciones de masticar o hablar, ya que la existencia de espacios dentales vacíos provoca posiciones anómalas y forzadas en el resto de la boca.

Con todo, la princesa se ha mostrado siempre con naturalidad, sin esconder su dentadura. La joven no ha evitado sonreír ni cuando era evidente la ausencia de las citadas piezas dentales, ni ahora que lleva brackets.

El pasado mes de enero, cuando aún cursaba sus estudios de bachillerato en Gales, Leonor viajó a Madrid para someterse a diferentes revisiones. Visitas periódicas en las que la heredera acudía al especialista para que este comprobara la evolución del tratamiento corrector. Una técnica cuya duración aproximada es de entre seis y ocho meses y que a la vista está que ya está dando sus frutos.