Marc Ribas, de piedra: cierra para siempre un histórico restaurante de 'Joc de Cartes'

Joc de Cartes es uno de los programas más populares de TV3, donde varios restaurantes de Cataluña compiten entre sí para demostrar quién ofrece la mejor experiencia gastronómica. El formato sigue a cuatro restaurantes de una misma zona o con un concepto similar.

De esta manera, se evalúan mutuamente en diversas categorías: comida, servicio, ambiente y relación calidad-precio. Cada episodio es conducido por Marc Ribas, quien además de ser el presentador, también evalúa a los participantes.

Lo que hace único a Joc de Cartes es la mezcla de entretenimiento y cultura gastronómica. A través del programa, el público tiene la oportunidad de descubrir nuevos restaurantes y aprender más sobre la rica diversidad culinaria que ofrece Cataluña.

Sin embargo, no todo son buenas noticias para los restauradores que participan en el concurso catalán. Desafortunadamente, uno de los restaurantes que concursó en el espacio de Marc Ribas se ha visto obligado a cerrar sus puertas para siempre. 

Cierra un restaurante que participó en Joc de Cartes

Can Miserias, conocido por su cocina tradicional catalana y por su participación en el programa Joc de Cartes, ha cerrado sus puertas de manera definitiva. La noticia ha sorprendido a muchos de sus seguidores, ya que el local había ganado notoriedad tras su aparición.

Aunque no se han revelado los motivos exactos del cierre, se especula que podrían estar relacionados con dificultades económicas. Una situación que muchos locales de restauración han enfrentado en los últimos años.

Can Miserias, situado en el corazón de Barcelona, era un referente de la gastronomía catalana. Sus dueños presentaban una propuesta que combinaba platos tradicionales y recetas familiares con un ambiente acogedor y auténtico.

La participación en el formato de Marc Ribas había sido un momento clave para el restaurante, que logró atraer la atención de nuevos clientes. Sin embargo, el éxito mediático no fue suficiente para garantizar su continuidad.

Los clientes habituales y los nuevos seguidores que descubrieron el restaurante gracias a la televisión lamentan su cierre definitivo. Muchos recuerdan la calidad de sus platos y la calidez del servicio, que hacían de Can Miserias un lugar especial en la ciudad de Barcelona.