El hijo de Kiko Matamoros, operado por tercera vez: qué le está pasando

Kiko Matamoros acaba de recibir un tremendo varapalo mientras se encuentra de vacaciones junto a  Marta López en Tulum. Y es que, su hijo, Diego Matamoros, ha sido operado por tercera vez en lo que llevamos de 2023, como consecuencia de la espondilolistesis degenerativa que padece. 

Una grave condición que no tiene cura y que afecta a los tejidos de las vértebras, como son, entre otros, las articulaciones, los ligamentos y el disco intervertebral.

Recordemos que fue hace tan solo unas semanas cuando el exnovio de Carla Barber tuvo que ser intervenido por esta enfermedad, la cual padece desde hace un tiempo. 

Ayer, el mismo hijo de Kiko Matamoros confesó a través de su perfil de Instagram la razón por la que tuvo que ser sometido a una nueva operación.

¿Qué ha sucedido esta vez para que el hijo de Kiko Matamoros haya tenido que volver a operarse?

El hijo de Kiko Matamoros ha vuelto a pasar por quirófano

“De nuevo en el taller”, así anunció el hijo de Kiko Matamoros en Instagram que había vuelto a pasar por quirófano por tercera vez. Junto a esta publicación, adjuntó una foto en la que aparecía él vestido con una bata de hospital, preparado para ser intervenido.

Horas más tarde, el exconcursante de Supervivientes 2014 reaparecía en dicha red social para compartir todos los detalles a sus seguidores. 

Quitándole hierro al asunto, el hijo de Kiko Matamoros explicó que había ido a revisión y que había sido intervenido para intentar aliviar los dolores que le provoca su enfermedad. Se trata de un nuevo tratamiento que combina radiofrecuencia con corticoides, y que ha comenzado.

Diego Matamoros ha empezado un tratamiento para su patología

Según el mismo Diego, gracias a esta nueva cirugía, “se puede mover un poco más”, teniendo en cuenta que las veces anteriores han sido mucho más duras en comparación con esta. “Llevaba diez días bastante complicados, con las piernas que no las podía ni mover”, contó.

Este nuevo tratamiento, tal y como ha contado, lo llevará a someterse a nuevas operaciones en el futuro. En concreto, tendrá que ser intervenido en quirófano cada dos o tres meses, aproximadamente.

Una vez terminado este proceso, a final de año, los especialistas valorarán si el hijo de Kiko Matamoros está listo para someterse a un tratamiento de gel.

“Y a partir de ahí, creo que puedo tener, si soy apto para ello, una vida normal como la que tenía”, zanjó al respecto.