Boris Izaguirre recuerda el peor momento que vivió por culpa de su madre: ‘Yo decidí…’
Boris Izaguirre confiesa a Dani Martínez el peor momento que ha vivido por culpa de meterse en la piel de su madre
En una emotiva y divertida entrevista en el programa Martínez y Hermanos, Boris Izaguirre compartió con Dani Martínez una anécdota de su juventud.
Un duro momento que vivió en el carnaval, según ha confesado el escritor: “Yo decidí disfrazarme de mi madre”. Y esta confesión no dejó indiferente a nadie.
Boris Izaguirre cuenta la divertida historia que vivió
Boris comenzó su relato recordando cómo, en aquellos años, decidió disfrazarse de su madre para participar en los carnavales, una festividad muy celebrada en Venezuela.
“Yo decidí disfrazarme en unos carnavales en Caracas con una ropa de mi mamá. Una prenda que ella no se quería poner porque le parecía extraña”, explicó Boris, haciendo reír al público al recordar lo peculiar de la situación.
La prenda en cuestión resultó ser la elección perfecta para un joven Boris decidido a destacarse y a hacer una declaración audaz, aunque con un toque de picardía.
Con la prenda de su madre puesta, Boris salió a la calle, dispuesto a disfrutar del carnaval. Lo que no esperaba Boris era el giro inesperado que tomaría la noche cuando se encontró cara a cara con el jefe de su madre. “Este señor era bastante elegante y muy sofisticado”, recordó Boris, remarcando la ironía del momento.
La sorpresa y la vergüenza iniciales fueron inmensas. En su mente, Boris ya imaginaba las posibles repercusiones de aquel encuentro: ¿qué pensaría su madre cuando su jefe la viera reflejada en él?
La reacción del jefe de su madre sorprendió a Boris Izaguirre
El jefe de su madre, lejos de reaccionar con sorpresa o desaprobación, hizo algo que Boris jamás olvidaría. “Se levantó y me dijo ‘Hola Belén, ¿Cómo estás?’”, narró Boris.
Con solo cuatro palabras, el hombre había transformado un momento potencialmente embarazoso en un gesto de cortesía y complicidad. Para Boris, esas simples palabras fueron un salvavidas, una mano extendida que lo sacó de un momento de “tierra, trágame”.
Este inesperado encuentro, más allá de ser una simple anécdota de carnaval, dejó en Boris una enseñanza que compartió con la audiencia. “Lo más importante del «tierra, trágame» es que haya una persona que te saque de ese momento”, reflexionó Boris.
Subrayando el poder que tienen los pequeños gestos de empatía y comprensión en situaciones difíciles. Para él, aquel encuentro fue una demostración de que la elegancia y la sofisticación se reflejan en la apariencia. Además, se ve en la capacidad de los demás para hacer sentir cómodos a quienes los rodean, incluso en circunstancias incómodas.
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