La Seguridad Social pone el foco en las bajas laborales: empezará a tomar medidas
En los primeros siete meses del año la partida destinada a las bajas laborales se incrementó casi un 18%
La Seguridad Social se enfrenta a una situación complicada debido al aumento significativo en los gastos por bajas laborales. En los primeros siete meses de 2024, el gasto en subsidios por incapacidad temporal aumentó un 17,8%. Alcanzaba así los 9.065,83 millones de euros, lo que representa el 76% de la partida presupuestada para todo el año.
Esta cifra refleja un aumento preocupante que presiona las finanzas del sistema. Al mismo tiempo genera inquietud tanto en el Gobierno como en los agentes sociales.
Causas del aumento de bajas laborales
Este incremento en los subsidios por bajas laborales se debe a varios factores. Uno de los más relevantes es la sobrecarga de los servicios públicos de salud. Provoca que los tiempos de espera para recibir atención médica sean más largos, alargando así los periodos de baja.
Además, la mayor incidencia de enfermedades relacionadas con la salud mental y el envejecimiento de la población laboral son factores que agravan la situación. La pandemia de Covid-19 ha dejado secuelas, aumentando los casos de incapacidad temporal debido a enfermedades que se reconocen con mayor frecuencia.
El absentismo laboral, tanto justificado como no justificado, también ha crecido. A medida que mejora el mercado laboral, los trabajadores se sienten más seguros de tomar bajas sin temor a represalias. Esto también contribuye al aumento general de las incapacidades temporales.
Cómo afecta a la Seguridad Social
Este aumento de las bajas laborales está poniendo en jaque la sostenibilidad de la Seguridad Social. Y es que los gastos se están disparando mucho más rápido de lo previsto. El impacto financiero es considerable y, si no se toman medidas correctivas, podría comprometer otros aspectos fundamentales del sistema.
Para abordar este problema, el Gobierno ha decidido implementar varias medidas. Una de ellas es la derivación de las bajas de origen traumatológico a las mutuas colaboradoras de la Seguridad Social. Esta medida busca aliviar la carga sobre los servicios públicos de salud y agilizar los procesos de alta.
Además, se está planeando la creación de una mesa específica para el seguimiento y control de las incapacidades temporales. En esta mesa participarán tanto el Gobierno como los agentes sociales. Tendrá como objetivo analizar los indicadores de incapacidad temporal y desarrollar estrategias para reducir los gastos asociados.
Esta iniciativa forma parte de un esfuerzo más amplio para reformar el sistema y asegurar su viabilidad a largo plazo.
Retos y perspectivas futuras
La Seguridad Social se enfrentará durante los próximos años a un importante reto. Debe buscar el equilibrio entre ofrecer el apoyo necesario a los trabajadores y mantener la sostenibilidad financiera del sistema. Con la partida destinada a las bajas laborales casi agotada y aún varios meses por delante, es urgente que se implementen soluciones.
Por otra parte, la mejora de los ingresos por cotizaciones, que han crecido un 7,5% este año, podría ofrecer un respiro. Sin embargo, el incremento de los gastos sigue superando con creces el aumento de los ingresos. Por lo tanto, deja al sistema en una situación delicada.
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