Marian Vejcik de Getty Images, Bluecinema, Andrea Piacquadio Nuevo varapalo de la Seguridad Social a estas empresas: tocará rascarse el bolsillo
Las compañías que paguen a sus empleados más de 6.000 euros al mes deben asumir un nuevo recargo a partir de 2025
A partir de 2025, las empresas en España con trabajadores que ganen más de 60.000 euros anuales deberán asumir un nuevo recargo. Es lo que se conoce como cuota de solidaridad.
Este gravamen afectará tanto a pequeñas y medianas empresas (pymes) como a grandes negocios que emplean a personas con salarios elevados. Es el caso, por ejemplo, de altos ejecutivos, abogados o arquitectos.
El recargo, que ha generado preocupación entre los pequeños empresarios, implicará una mayor cotización a la Seguridad Social. No debe confundirse con el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI).
Las compañías deben asumir un nuevo recargo en 2025 | Getty Images, Pixelshot, RossHelen
Qué es la cuota de solidaridad
La cuota de solidaridad tiene como objetivo principal garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones. Se aplicará a los salarios que superen la base máxima de cotización, que en 2024 es de 4.720,5 euros mensuales.
El cálculo de este recargo se aplicará en tres tramos según el salario del empleado, recoge Noticias Trabajo. Para entenderlo mejor se utilizará como ejemplo el caso de un trabajador que gane 7.500 euros brutos al mes.
El primer tramo corresponde a un 0,92% para la porción de salario que supere en un 10% la base máxima de cotización. Lo que añade unos 4,34 euros al mes.
El segundo tramo, un 1%, se aplicará entre el 10% y el 50% de exceso sobre la base máxima, sumando otros 18,88 euros mensuales. Finalmente, los ingresos que sobrepasen el 50% de esa base pagarán un 1,17%, añadiendo 4,90 euros adicionales.
Con todo esto, una empresa con un trabajador que gane dicha cantidad al mes pagaría un total anual de 337,44 euros por cuota de solidaridad. De esta cifra, el 83,39% será asumido por la empresa, lo que equivale a 281,39 euros anuales. Por su parte, el 16,61% será descontado del salario del empleado.
La cuota de solidaridad se considera un 'impuesto encubierto' | Billion Photos, PixaBay
Un nuevo golpe para las pequeñas empresas
Este "impuesto encubierto" supone un nuevo golpe para las pymes, que ya afrontan desafíos como el aumento de costes laborales. El objetivo de la cuota es garantizar un flujo extra para las pensiones. Pero a corto plazo incrementará la presión financiera sobre los negocios, especialmente aquellos que operan en sectores con altos salarios.
Las empresas deberán ajustar sus presupuestos a esta nueva realidad y buscar formas de absorber el impacto sin afectar su rentabilidad. Además, la aplicación de esta medida no se limita a las grandes compañías. También a pymes que cuenten con personal de alta cualificación o cargos ejecutivos.
Este nuevo varapalo de la Seguridad Social promete ser un tema de debate entre empresarios y el gobierno. Se debe encontrar el equilibrio entre garantizar las pensiones y no ahogar a las empresas con más cargas impositivas.
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