Saltan las alarmas sobre la carne de pollo que vende Lidl: aviso a todos los clientes

Lidl es una cadena de supermercados reconocida en todo el país y la cual se ha ganado la confianza de sus compradores. Dentro de sus lineales puedes encontrar productos de todo tipo, desde los más convencionales hasta los más selectos. Pero recientemente uno de sus productos más vendidos, la carne de pollo, ha sido duramente cuestionada.

Y todo tras la publicación de un estudio elaborado por el Observatorio de Bienestar Animal (OBA) y del cual se ha hecho eco Público. En este informe se señala que el 97,9% de las bandejas de pollo analizadas en supermercados Lidl en España presentan estrías blancas. Se trata de una patología muscular, asociada al rápido crecimiento de los animales.

Aunque no afecta la seguridad alimentaria, esta condición reduce la calidad nutricional del pollo, aumentando su contenido graso hasta en un 224%. Asimismo, disminuye sus proteínas hasta un 9%. El estriado blanco, también llamado miopatía, está relacionado con el desarrollo intensivo de razas de pollos de crecimiento rápido.

Lidl sale en defensa de la calidad de su pollo

"Muchas personas eligen el pollo como opción más saludable, pero desconocen las condiciones que afectan su calidad", explica Míriam Martínez, veterinaria y representante del OBA.  De igual forma, señala que resulta inviable etiquetar con precisión los valores nutricionales de cada lote debido a las variaciones dentro de las bandejas.

El estudio del OBA halló que más del 20% de las bandejas contenían pollo con un grado severo de estriado blanco, lo que compromete aún más su calidad. De las 321 tiendas analizadas, solo el 2,1% de los productos no presentaba esta condición.

Lidl ha querido salir y dar su versión e intentar defender parte de uno de sus productos más vendidos. En este sentido, desde el supermercado alemán aseguraron que en España se cumple con controles de calidad rigurosos que superan los límites legales. De igual forma, afirman que las estrías blancas son una característica visual común en el pollo comercializado, sin repercusiones significativas en su valor nutricional.

Paralelamente, la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados respaldó la postura de Lidl, subrayando que la legislación actual garantiza estándares adecuados de bienestar animal. El informe del OBA vincula esta patología al modelo de ganadería industrial, que prioriza el rendimiento económico sobre el bienestar animal.

Todos los ojos están puestos en la carne de pollo de Lidl

"El crecimiento acelerado al que se somete a los pollos equivale a que un bebé alcanzara 300 kilos en dos meses", denuncia el informe. Todo ello citando estudios que indican que hasta el 78% de los pollos de razas de crecimiento rápido presentan esta enfermedad. Además, estos métodos industriales aumentan el riesgo de deformaciones, enfermedades cardíacas y dificultades respiratorias en las aves.

No es la primera vez que salen a la luz este tipo de informaciones relacionadas con LidL. Tanto es así que hace un tiempo se hizo público un informe en el que se afirmaba haber encontrado bacterias resistentes a antibióticos en el 71% del pollo de Lidl.

Ante esta situación, organizaciones como el OBA urgen a las autoridades a reforzar la vigilancia sobre las condiciones de cría en granjas intensivas y a promover modelos alternativos. Mientras tanto, Lidl sigue posicionándose como un supermercado líder dentro y fuera del país.