La mejor escapada de fin de semana está a una hora de Barcelona y no es muy conocida
La ruta del Molino de Brotons, a una hora de Barcelona, es una buena opción para desconectar de la ciudad y pasar un día rodeado de naturaleza
Con la llegada de la primavera y el buen tiempo, son muchos los que aprovechan para hacer escapadas a la naturaleza y conocer nuevos lugares. A una hora y cuarto de Barcelona, se encuentra un lugar poco conocido donde escaparse un fin de semana.
En la comarca del Moianès, concretamente en el municipio de Castellcir, encontramos el Molino de Brotons, también conocido como Molino de la Tosca. Este paraje desconocido para muchos es un espacio ideal para desconectar un fin de semana.
El Molino de Brotons estuvo en funcionamiento desde 1608 hasta mediados del siglo XIX. Y es que en 1863, una subida de la riera de la Marfà inundó el molino llevándose consigo la vida de ocho personas.
La ruta del Molino de Brotons
Esta escapada cerca de Barcelona se trata de una ruta circular que tiene una distancia de unos 10 kilómetros y una duración de unas dos horas y media. Por ello, y por su bajo nivel de dificultad, esta ruta es apta para toda la familia.
Esta ruta de senderismo que llega hasta el Molino de Brotons, pasa también por otros lugares como una poza de agua, una iglesia medieval y la antigua masía de Marfà.
Tras dejar el coche en un parking gratuito, la ruta tiene inicio en el puente de la Fàbrega. El camino llano y tranquilo hacia el Molino de Brotons permite desconectar del ruido de la ciudad y disfrutar de unas vistas preciosas a la ribera de Castellnou.
Por este camino, encontraremos el llamado ‘gorg estret’ o poza estrecha, un sitio singular creado por la erosión del agua. Eso sí, hay que ir con cuidado de no resbalar y caer dentro de la poza.
Seguidamente, en el siguiente tramo del recorrido se encuentra el Molino de Brotons y el Salto de la Tosca. Una vez llegas, se puede observar el molino incrustado en las rocas del salto del agua. Además de disfrutar de las vistas, se puede visitar el interior del molino y hacer fotografías desde su interior.
Y es que esta ruta llena de encanto es ideal para hacer una excursión o para escaparse un fin de semana de la ciudad.
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