Montaje de una carretera con tráfico de coches, unos obreros haciendo obras en una calle y la señal de obras
ACTUALIDAD

Las ocho carreteras de Barcelona que se verán afectadas por obras próximamente

Las carreteras de Barcelona tienen un presupuesto millonario que va a cargo del Ministerio de Transportes del Gobierno

Las carreteras de Barcelona están en plena renovación. La ciudad no solo necesita un lavado de cara a nivel social, también en el ámbito de las carreteras. De ahí que se prevean cambios en hasta ocho vías de la Ciudad Condal.

Así lo ha anunciado el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ante la formalización de un contrato por un valor de 3,6 millones de euros. La actuación se destinará a la reparación y sustitución de juntas de dilatación en diversas carreteras.

Este proyecto tiene como objetivo principal abordar aquellas que han alcanzado el final de su vida útil en Barcelona. Se prevé que la formalización se publique próximamente en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Las 8 carreteras afectadas por obras próximamente en Barcelona

Concretamente, las carreteras de Barcelona afectadas son la A-2, N-340, B-10, B-20, B-22, B-23, B-24 y B-30 de la Red de Carreteras del Estado. Todas ellas se verán beneficiadas por estas actuaciones, que forman parte del programa de conservación y mantenimiento de la mencionada red en Barcelona.

Cabe destacar que desde junio de 2018, el Ministerio ha destinado más de 188 millones de euros a este programa en la provincia de Barcelona. Demostrando así su compromiso con la seguridad vial y la mejora de la infraestructura viaria.

Cambios en las carreteras del centro de Barcelona

Pero estas no son las únicas, y diversas calles, avenidas y carreteras de Barcelona se pondrán patas arriba este año. La pacificación de la ronda de Sant Antoni, el retorno al Camp Nou, la remodelación de la Via Laietana son un ejemplo. También la segunda fase de la Estación Central de la Sagrera.

Asimismo, Barcelona vivirá cambios con la remodelación de la L8, el paseo verde para la plaza de les Glòries, y el tranvía de la Diagonal. No cabe duda de que las obras no gustan a nadie. Y menos en una ciudad como Barcelona donde el tráfico, los turistas y el ajetreo constante de personas es una evidencia.

Eso sí, todas ellas se hacen con el objetivo de mejorar la circulación en sus carreteras. Así que, una vez estén terminadas, la ciudadanía dará las gracias por su ejecución. Por el momento, cabe esperar sus resultados.

➡️ Actualidad

Más noticias: