El entrañable pueblo catalán en el que se come de maravilla, según National Geographic
El lugar se ubica en la demarcación de Gerona y desde hace décadas se ha convertido en un atractivo para los turistas
Cadaqués se define por sí solo. Rara es la persona que no ha escuchado nunca hablar de este pueblo de la Costa Brava. Y muchos son los que han tenido la suerte de perderse por sus calles y oler la brisa del mar que llega a sus orillas.
Bien, pues su encanto ha llegado mucho más lejos y hasta la revista National Geographic lo ha puesto en el mapa. Y no solo por la belleza innata que guarda, sino porque se come de maravilla. La popular revista resalta su "verdadero potencial gastronómico" gracias a recetas que combinan productos frescos del mar y la montaña.
Entre los platos más emblemáticos destacan el suquet de peix, un guiso de pescado y mariscos cocinado con tomate. También los calamares a la plancha, la coca de pescado, una empanada típica y todo un clásico de la cocina catalana. Los restaurantes de Cadaqués son una parada imprescindible para disfrutar de estas delicias.
National Geographic desvela dónde comer en Cadaqués
National Geographic destaca lugares como Casa Anita, que mantiene su esencia marinera en un ambiente tradicional, y Compartir, que sorprende con su creatividad culinaria. Cadaqués ofrece una amplia variedad de actividades para los visitantes.
Entre sus principales atractivos se encuentran la iglesia de Santa María o el Parque de Cap de Creus, con acantilados, calas escondidas y paisajes únicos. No puedes irte de Cadaqués sin pisar su playa, una zona ideal para disfrutar en familia, con bares y tiendas cercanas para completar la experiencia.
Un rincón especial de Cadaqués es la Cala Montjoi, ideal para quienes buscan relajarse en un entorno natural único. Cadaqués se consolida como un destino que lo tiene todo: historia, arte, naturaleza y una gastronomía que deleita los sentidos. No es de extrañar que sea considerado un tesoro en la Costa Brava.
Un enclave único
Ubicado entre el mar Mediterráneo y las montañas de los Pirineos, Cadaqués destaca por sus casas blancas, calles estrechas y una atmósfera tranquila. Este idílico entorno no solo atrae por su belleza natural, sino también por su historia vinculada al arte y la bohemia, siendo Salvador Dalí uno de sus habitantes más ilustres.
La casa-museo del famoso pintor es hoy una parada obligatoria para quienes deseen conocer más sobre su vida y obra. Sin duda, Cadaqués es un lugar mágico para quienes aman lo bonito, las cosas con sabor y encanto. Llegar hasta este pueblo cuestan unas cuantas curvas, pero, según los expertos, vale la pena.
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