Mujer sorprendida con una camiseta verde sosteniendo una imagen de un mapa con la bandera de Cataluña y un pin sobre un paisaje costero.
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El atractivo destino a poco más de una hora y media de Barcelona que te encantará

Un pueblo costero que combina historia, naturaleza y la rica gastronomía de la región del Baix Empordà

En la costa de una de las regiones más bellas de Cataluña, encontramos un lugar donde la historia se entrelaza con la belleza natural. Este rincón cuenta con una rica herencia que se remonta a épocas prehistóricas, con vestigios que atestiguan su antiguo pasado. Su geografía variada, que abarca desde la montaña hasta el mar, ofrece un atractivo singular para quienes buscan disfrutar de la naturaleza y la cultura.

Este destino turístico ha evolucionado a lo largo del tiempo, transformándose de una población rural en un punto de interés para veraneantes. La mezcla de historia y modernidad lo convierte en un lugar ideal para explorar, ya sea a través de sus rutas de senderismo o disfrutando de la playa. Aquí, la gastronomía también juega un papel fundamental, destacando la riqueza de productos locales.

Vista de una pequeña playa rocosa con aguas turquesas y un edificio en la ladera rodeado de vegetación.

Descubriendo Calonge y Sant Antoni

Calonge y Sant Antoni se ubica en el Baix Empordà, en la provincia de Girona. Está compuesto por dos núcleos: Calonge, en el interior, con un castillo medieval de los siglos XII y XIII, y Sant Antoni, junto al mar. La población es de alrededor de 12.000 habitantes que disfrutan de un ambiente tranquilo.

Una antigua muralla de piedra con almenas y una torre bajo un cielo despejado y un árbol en primer plano.

La costa de este municipio ofrece playas y calas que son perfectas para practicar deportes náuticos durante todo el año. Las actividades acuáticas son muy populares, aprovechando el clima cálido y las agradables temperaturas del Mediterráneo.

Además, los senderos que recorren la zona invitan a pasear y disfrutar de vistas impresionantes. No se puede dejar de probar las gambas, un plato emblemático de la localidad que refleja la rica tradición culinaria de la región.

Historia y evolución

La transformación de Calonge y Sant Antoni comenzó a finales del siglo XVIII, cuando pasó de ser un asentamiento rural a un centro industrial, gracias a la producción de corcho. Su proximidad al puerto de Palamós facilitó el desarrollo de esta industria, convirtiéndose en un importante productor de tapones. Sin embargo, a medida que avanzaba el siglo XX, la mecanización y la llegada del turismo provocaron el cierre de muchas fábricas de corcho.

Vista de una pintoresca cala con casas coloridas en la costa, rodeada de árboles y bañistas disfrutando del mar.

El turismo ha jugado un papel crucial en la economía local desde los años 30, convirtiéndose en la principal fuente de ingresos. El municipio se encuentra a solo 120 km del centro de Barcelona, lo que facilita el acceso para los visitantes. La oferta turística incluye una amplia gama de alojamientos y restaurantes que atraen a personas de diversas partes del mundo.

Esta evolución ha permitido que el pueblo conserve su esencia, mientras se adapta a las demandas contemporáneas de los turistas. Calonge y Sant Antoni es un destino que combina historia, naturaleza y gastronomía, convirtiéndose en un lugar ideal para disfrutar de unas vacaciones inolvidables en la Costa Brava.

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