Una soltera estalla contra su cita en 'First Dates' tras un comentario machista

Abraham se presentó a 'First Dates' para conocer a una mujer que le diese la  misma importancia que le daba él al sexo. El soltero, nada más llegar a 'First Dates' y saludar a Carlos Sobera, le recordó al presentador "cuando le preguntó a una señora dónde estaba el punto G".

Por otro lado, Concha era una mujer muy moderna que buscaba un hombre que tuviese ganas de vivir y con el que poder compartir aficiones. Al entrar por la puerta, se sintió enormemente atraída por el presentador de 'First Dates'. "Me gusta mucho, es un profesional, un artista", confesaba la soltera.

Abraham reaccionó fatal a la entrada de Concha. "No es lo que yo esperaba", declaraba el soltero, tras haber pedido a "una chica joven". Ni las bromas de Carlos Sobera le sacaban una sonrisa.

Las primeras impresiones no resultaron buenas, pero la cita continuó peor. Concha comenzó hablándole de sus experiencias amorosas, que se pueden resumir en una, ya que había estado 48 años casada. "Me casé con 18 años", reconocía la soltera.

Abraham, en cambio, estaba muy parado, no sabía de qué hablar. Era más que evidente el desagrado que tenía por su cita.  "Esperaba a una persona más jovial, más divertida, más explosiva", admitía el soltero, viendo a su cita como una mujer mayor y aburrida.

Concha le preguntó a Abraham por si estaba jubilado y él, lejos de contestarle, le comunicó que había pedido a una mujer menor de 60 años.  Al soltero siempre le habían gustado jóvenes, y Concha no estaba siendo su prototipo. "Los hombres así me dan asco, no asimilan la edad que tienen", expresó la soltera desahogándose.

El soltero supuso que Concha sabría cocinar por su edad y ella estalló. "No sé ni cómo he aguantado", respondía la soltera. Concha no ha dudado en decirle que le estaba doliendo que la estuviera llamando vieja durante toda la cita. La soltera sentía que ella no le había ofendido, pese a que ella se estaba sintiendo así toda la velada. 

Abraham enfadó mucho más a Concha cuando le preguntó si echaba más de menos la compañía o el sexo. "Es un sinvergüenza, me dice que le parezco vieja y luego me pregunta por el sexo", revelaba la soltera, que estaba deseando acabar la cita con Abraham.

Llegó el momento de la decisión final, un tanto previsible. El soltero aprovechó para reconocer que no se había portado bien con ella, que era consciente de su edad y que el problema lo tenía él, al no aceptar la suya.