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Consigue una piel más suave y luminosa de forma natural con esta rutina

Añade esta rutina en tu día a día y consigue una piel mucho más suave y luminosa de manera natural sin apenas esfuerzo

¿Estás harta de tener la piel áspera o seca? ¿Tienes envidia de las pieles suaves y con luz que están hidratadas? No te preocupes porque existen diferentes rutinas y trucos para conseguir una piel mucho más suave.

El truco está en cuidarla de manera adecuada para poder notar un buen resultado. Seguramente, estés haciendo algo mal o no estés siguiendo una buena rutina para mantener una piel bonita y perfecta. 

Te cuento todo lo que necesitas saber para mejorar el aspecto de tu piel. Tan solo tendrás que seguir esta sencilla rutina en tu día a día y notarás resultados en poco tiempo. Atenta porque esto te va a interesar, te lo aseguro.

Cuida tu piel y consigue un aspecto más suave con esta rutina

La piel es el órgano corporal más extenso. Por lo que juega un papel fundamental a la hora de regular la temperatura corporal, además, también actúa como barrera para proteger el cuerpo frente a las infecciones. Aunque hay que mencionar, que hay determinadas partes del cuerpo que son más propensas a la hidratación.

Cuando la piel está seca, se puede notar y verse rígida o enrojecida. Esto se debe a factores muy comunes en nuestro día a día como es el caso de una alimentación poco equilibrada o malos hábitos como el tabaco o el alcohol. El exceso de exposición al sol y el estrés también impiden tener una piel mucho más suave.

Para evitarlo, puedes seguir una rutina sencilla. Cuando la piel está áspera es por exceso de células muertas, así que conviene realizar una exfoliación una vez a la semana o cada quince días, por ejemplo. Escoge un exfoliante más fino o grueso dependiendo del área que quieras tratar.

Ir a la playa suele servir de terapia para este problema. De esta manera, se exfolia la piel gracias a la arena y al mar, además de aportarle minerales. Pero no solo hay que exfoliarla, también hay que hidratarla con una loción hidratante adecuada.

Usar aceites vegetales después de ducharse es altamente eficaz. Beber agua también ayuda, ya que consigue un efecto beneficioso: conseguir una piel más suave e hidratada. Se recomienda también cepillar la piel a diario, de abajo hacia arriba, siempre en dirección al corazón, esto ayuda a activar la circulación y mejorar la oxigenación de la piel.

Por último, relajarse también nos ayudará al cuidado de la piel. El sistema nervioso está muy relacionado y las flores de Bach, la homeopatía y las plantas medicinales nos pueden ayudar. Siguiendo esta rutina fácil y sencilla, lograrás resultados increíbles en muy poco tiempo.

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