Durante los últimos años, la constante subida del Euríbor había sido motivo de preocupación para quienes tenían préstamos hipotecarios a tipo variable, ya que sus cuotas mensuales habían ido aumentando progresivamente. Sin embargo, las perspectivas de estabilización y posterior disminución han generado una expectativa positiva en el mercado inmobiliario y financiero del país.
Es importante entender mejor el impacto de estos pronósticos en la economía de las familias españolas. Hay que recordar que el Euríbor es la tasa a la que los bancos se prestan dinero entre sí en la zona euro. Además, sirve como referencia para gran parte de los préstamos hipotecarios en España.
Cuando el Euríbor sube, las cuotas de los préstamos también lo hacen, afectando directamente al bolsillo de los hipotecados. Por el contrario, cuando baja, los pagos mensuales de las hipotecas también disminuyen, liberando recursos para los hogares.
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Desde diciembre de 2021, el Euríbor no ha dejado de subir. En ese momento, el tipo de interés base de las hipotecas en España era del -0,502%. Sin embargo, en el pasado mes de junio finalizó por encima del 4%, ya que esta variable ha ido en constante aumento desde entonces.
Los datos de junio son los más altos desde 2008. Esta fuerte subida del Euríbor se debe a la inflación que ha asolado Europa últimamente.
Como resultado, el Banco Central Europeo (BCE) ha subido las tasas de interés hasta ocho veces seguidas para frenar la inflación. Y la subida de los tipos de interés tendrá un impacto directo en la evolución del Euríbor.
Este aumento está afectando duramente a las personas con hipotecas variables.
Bankinter advirtió que la progresiva normalización de la inflación tanto en Europa como en Estados Unidos podría desembocar en una ansiada moratoria de los tipos de interés de referencia en España.
Específicamente, esperamos que el indicador termine en 4,10% en 2023, ligeramente por encima de los niveles actuales. Pero, sin embargo, caiga a 3,70% y 3,20% en 2024 y 2025, respectivamente.
Mientras tanto, la firma inmobiliaria Housfy predice que el Euríbor alcanzará un máximo del 4,5 % a fines de 2023. Todo ello, a menos que el BCE eleve las tasas de interés por encima del 4,75 %. A partir de ese momento, la variable comenzará a descender, alcanzando el 2,2% en 2025.
La visión optimista de Bankinter y Housfy se basa en el análisis de los datos económicos. Además, de basarse en la evolución de los tipos de interés en Europa y Estados Unidos.
Según sus estimaciones, la normalización de la inflación será un factor clave para frenar el aumento del Euríbor. La gradual estabilización de la economía tras la pandemia y la consecuente recuperación de la demanda y el empleo. Todo ello ha llevado a que los bancos centrales adopten una postura más cautelosa en cuanto a las políticas de tipos de interés.
En el caso de España, la expectativa de que el indicador cierre 2023 en el 4,10% supondría una ligera alza respecto al nivel actual. Sin embargo, lo más relevante es el pronóstico de descenso en los años posteriores.
Si se cumplen las predicciones, el año 2024 se convertiría en un punto de inflexión para los hipotecados. Experimentarían una disminución de la carga financiera al reducirse la tasa de interés de sus préstamos.