Varios coches estacionados en un aparcamiento y en el círculo, una multa en el parabrisas

SOCIEDAD

¿Me pueden multar por aparcar demasiado cerca de los demás coches?

Los ayuntamientos pueden sancionar a aquellos vehículos que no respeten unas distancias mínimas a la hora de estacionar

En la mayor parte de las ciudades, el aparcamiento se encuentra muy cotizado. Cada vez hay menos plazas disponibles y el número de vehículos que circulan por nuestras carreteras continúa en aumento. Y en ocasiones cometemos el error de estacionar en un sitio especialmente estrecho, en el que entra el coche con muchas dificultades.

Eso nos llevará a ajustarlo demasiado respecto al resto de automóviles. Por lo tanto, le estaremos dificultando la entrada al coche a los demás y complicándole las maniobras de salida. Pero lo que muchos desconocen es que este tipo de prácticas pueden ser castigadas con una multa.

Este tipo de aparcamientos tan limitados de espacio pueden dejarnos alguna marca en la carrocería. Ya sea a la hora de abrir las puertas o al salir del aparcamiento. 

Conviene ser cívico y considerado con los demás. Y no solo por la sanción económica que nos pueden imponer los agentes. Es importante que antes de estacionar el vehículo nos aseguremos que el sitio disponible cuenta con las dimensiones adecuadas.

Hay que comprobar que queda el suficiente espacio tanto para nosotros como para el resto de conductores. No hay una distancia recogida por ley que se tenga que dejar a los demás. Pero lo normal sería que hubiera en torno a 30 centímetros para facilitar los movimientos de otros coches.

¿A cuánto asciende la multa por no dejar espacio a los demás en el aparcamiento?

Hay que decir que el Reglamento General de Circulación no contempla la obligación de respetar una distancia mínima entre vehículos. El estacionamiento en suelo urbano depende de las ordenanzas de cada municipio. Esto implica, por tanto, que la decisión de multar a aquellos que aparquen demasiado cerca de otros sea responsabilidad de las policías locales.

Tiene que existir una razón de peso para que finalmente opten por multar a un conductor por su aparcamiento. Por ejemplo, que no haya una distancia para que el otro usuario pudiera maniobrar con su automóvil. La sanción ronda entre los 80 y 200 euros, recoge La Razón.

Es cierto que la ley no recoge unas medidas mínimas. Aunque entre 30 y 50 centímetros sería suficiente. Tampoco es cuestión de excederse, ya que muchos conductores hacen todo lo contrario y ocupan más espacio del que precisan. 

En ocasiones llegan a abarcar más de una plaza impidiendo que el resto de usuarios puedan hacer uso de ellas. Más allá de la posible multa, es un gesto incívico hacia los demás.

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