Las distracciones al volante son una de las principales causas de accidente mortales en la carretera. Unos actos que pueden ser ‘inocentes’ como fumar, una llamada telefónica, cambiar el volumen o el GPS, entre otros, nos puede costar la vida. Estas acciones suelen ser habituales entre los conductores y suponen un gran riesgo para el conductor y para el resto de usuarios en la vía.
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha un plan contra las distracciones del conductor mientras conduce. A través de esta campaña, se incide que para reducir el número de siniestralidades en carretera y aumentar su seguridad, es necesario que el conductor esté en perfectas condiciones.
El conductor deberá mantener la mirada fija en la carreta, hidratado, el coche con una correcta climatización y no conducir bajo el efecto de alcohol, drogas u otros estupefacientes.
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Por otro lado, la entidad a través de su Twitter Oficial expresó que es tener un 'volumen moderado' tanto en radio como conversaciones. Escoger una lista musical apropiada podrá impedir que nos 'adormezca' o 'fomente una actitud defensiva o agresiva', manteniendo siempre la atención en la carretera.
Si seguimos los consejos aportados por la DGT podremos llevar una conducción adecuada que no traiga sanciones o un accidente. Además, se creará un ambiente positivo en nuestra mente al no alterar las emociones ni al oído.
La DGT nos avisa que el uso de la música con un volumen alto es muy habitual observarlo entre los conductores cuando van por carretera. Por ello, según el volumen que se encuentre la música, nos pueden poner una cantidad de multa que asciende hasta los 3000 euros
Aunque la DGT no ha creado la lista musical con las últimas canciones en tendencia o virales, si ha creado una con los ritmos de la música más adecuados. La entidad destaca que las canciones que nos acompañan a una conducción tranquila son aquellas que acompañan al ritmo cardiaco.
Siendo 60-80 pulsos cada sesenta segundos en cada tema musical, las mismas pulsaciones del latido en una persona tranquila.
Dos elementos necesarios que se imparten en las clases de las autoescuelas desde el primer momento. Nos piden que delante de un volante mostremos atención y precaución a todos los elementos que conforman la vía.
Así como a todos los estímulos externos que aparezcan de monera sorpresiva sobre ella y anticiparnos. De esta manera, estar atento a la letra de la canción que escuchamos conlleva e implica no oír las sirenas de vehículos o los avisos. En trayectos largos y rectos, no llevar la música nos dormiría.
Entre los más jóvenes existe una falsa y excesiva autoconfianza frente al volante. Llevar la música con un volumen alto hace que los más jóvenes consideren que este acto no sea relevante, ni sus consecuencias.
Por ello, la mayoría desconocen que circular con la música con un volumen alto por la vía o cerca de edificios públicos como hospitales puedan castigar con hasta 2500 euros.
Desde los distintos organismos municipales son aquellos que reflejan la cantía que pagará el usuario en cada sanción. La potencia del volumen de la música del coche irá relacionado según la contaminación acústica se haya realizado. Es decir, según los márgenes de decibelios de exceso de ruido.
La multas acústicas pueden llegar a tener la sanción más severa con hasta 3000 euros. El límite establecido como se encuentra en los 87 decibelios de ruido, si se supera esa cifra se deberá abonar una mayor cuantía.
En Europa, el ruido en las ciudades en la segunda causa más habitual que produzca estrés ambiental con daños en los ciudadanos. Solo es superado por la contaminación de aire.
Por ello, la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL) destacan que la perdida del oído podría ser perjudicial para el ser humano.
En primer lugar, el usuario podría crear un trauma acústico agudo, ante un sonido intenso e impulsivo. Continuado por el trauma acústico crónico, que aparece de manera gradual por la exposición seguida. En ambos casos, el daño será irreparable.