El ritmo ajetreado de trabajo, problemas de conciliación e incluso dificultades económicas son algunas de las situaciones que pueden llevar a sufrir estrés. Y este se traduce en síntomas habituales tales como falta de energía, dolores de cabeza o dolores en el pecho. Síntomas a los que se une otro más: la aceleración del envejecimiento.
Sí, lo has leído bien. El citado estrés agiliza ese proceso en el que vas dejando atrás la juventud, por lo que te echará más años encima de forma rápida.
Eso sí, tranquilo porque hay solución. Y ha sido encontrada ahora por un conjunto de investigadores internacionales.
Igual que el tabaquismo, el alcoholismo o el llevar adelante un embarazo de riesgo, el estrés también trae consigo un incremento del ritmo de envejecimiento. De ahí que en poco tiempo cualquier persona que lo sufre parece que se ha echado varios años encima.
Sin embargo, ahora un estudio acometido por investigadores a nivel internacional y publicado en la revista Cell Metabolism ha arrojado una esperanza al respecto. Sí, porque ha constatado que cuando ese envejecimiento acelerado se produce por el estrés, dicho efecto se revierte en el momento que esa situación que lo provoca desaparece.
NOVEDAD WHATSAPP: ¡Pincha aquí para recibir GRATIS los mejores Trucos para Adelgazar y de Belleza en WhatsApp! | Ahora también en TELEGRAM ¡Pincha aquí!
A esta conclusión se ha llegado después de hacer análisis utilizando relojes de metilación del ADN y experimentos con ratones. Pero tras los buenos resultados conseguidos, se optó por probar con humanos. Se trabajó con personas que se habían sometido a operaciones importantes, que habían pasado por un COVID grave e incluso con mujeres después del parto.
En estas pruebas con individuos se descubrió lo que hemos mencionado antes. Que el estrés enseguida provocaba un incremento de la velocidad con la que envejecían aquellos. Y también se ha podido certificar que cuando superaban esa 'mala racha', el citado ritmo de envejecimiento volvía a su normalidad.
Otra de las conclusiones interesantes es que se ha podido comprobar la efectividad en ese caso del uso de un fármaco, tocilizumab. Este, que se ha utilizado en pacientes que han vivido casos de coronavirus severos, ha acelerado la recuperación de aquellos a su edad biológica.
Asimismo, se ha destacado que los pacientes que se sometieron a una cirugía lograron volver a su ritmo de envejecimiento normal tras una semana.
Por todo ello, se ha concluido que “es posible reducir parcialmente la edad biológica de algunas células, tejidos y, posiblemente, organismos completos”. No obstante, aún queda mucho por investigar y por estudiar.
Después de conocer que el estrés envejece, sea del tipo que sea, es importante tomar medidas contra él por este síntoma que provoca y por otros muchos más que genera. Para reducir y acabar con él hay que tomar medidas como hacer ejercicio habitualmente y dedicar tiempo a uno mismo y a sus aficiones.
Pasar tiempo con los seres queridos, practicar relajación y llevar a cabo una dieta sana y equilibrada son igualmente útiles para alcanzar esa meta. Sin olvidar que también es efectivo solicitar ayuda de un profesional de la psicología.
De igual modo, es fundamental acometer tareas que puedan resultar desestresantes tales como pintar mandalas, dejar de lado la cafeína e incluso descansar adecuadamente.
Y hay más, también ayudará a organizarse bien la agenda, aprender a delegar y a decir no cuando sea necesario y, por supuesto, saber encontrar soluciones a los problemas.