Cinco pueblos de España donde vas a recibir dinero si te vas a vivir allí

El concepto de la España vaciada lleva años sonando en el debate público. Se basa en el hecho que, por falta de oportunidades o infraestructuras, en el 90% del territorio tan solo vive un 10% de la población. Sus habitantes marchan a las grandes ciudades o zonas metropolitanas como Barcelona o Madrid, o directamente al extranjero.

Para evitar ese éxodo, algunos municipios con riesgo de desaparecer en las próximas décadas ofrecen bonificaciones a aquellas personas que vayan a vivir en ellos. En algunos casos, incluso llegan a pagarte para ello, como medida desesperada para evitar su extinción. Te contamos cinco de ellos:

Ponga, Asturias

Ponga es un municipio de Asturias situado al sureste de la región con una superficie de 205 km² y cuenta con un 628 habitantes. Se encuentra en un territorio montañoso atravesado por el río Sella que forma parte del Parque natural de Ponga, declarado en 2003. Su alrededor formado por bosques de hayas, robles, castaños y abedules, y cumbres que superan los 2000 metros de altitud, como el Tiatordos, el Pierzu o el Recuencu.

En este pueblo, a los nuevos vecinos se les ofrece una ayuda de 6.000 euros por cada hijo nacido o adoptado en el municipio y una deducción del 60% del IBI. Además, también contarán con una bonificación del 95% en el Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana. A su vez, también garantizan un alquiler social y un programa de teletrabajo que facilita acceso a internet de alta velocidad y espacios coworking.

Rubiana, Ourense

Localizado en la provincia gallega de Ourense, Rubiana es una población de 1.376 habitantes en una superficie de 100 km². El municipio es atravesado por dos ríos, el Meira y el Galir, afluentes del Sil, y se encuentra en el Parque Natural de la Sierra de la Encina de Lastra. Además, conserva un patrimonio cultural importante con iglesias románicas y antiguas explotaciones mineras.

En este municipio, a los residentes se les ayuda con un alquiler social para familias con ingresos bajos, un plan de empleo rural y un servicio de telecentro con internet gratis. Además, la Junta de Galicia también concede una deducción del 5% del IRPF por la adquisición o rehabilitación de vivienda. A su vez, también se otorgan subvenciones para la creación de empresas, que cubren hasta el 75% de los gastos elegibles y con un máximo de 25.000 euros por proyecto.

Griegos, Teruel

De la lista, Griegos es el municipio más pequeño, ya que cuenta con 140 habitantes en una superficie de 31 km². Situado en la provincia aragonesa de Teruel, se encuentra a los pies de la Muela de San Juan, con vistas a los Montes Universales y el Parque Natural del Alto Tajo.

Además, hay que destacar que se encuentra a una altitud de 1.601 metros sobre el nivel del mar, convirtiéndolo en el segundo pueblo más alto de España, por detrás de Valdelinares. Por ello, no es de extrañar que haya nevadas y temperaturas bajo cero.

Las ayuda que se ofrece a sus habitantes consiste en una subvención de 3.000 euros a las familias que se instalen en el pueblo y tengan un hijo. Además, el gobierno de Aragón ofrece una deducción del 50% en el IRPF por alquiler de vivienda habitual y una bonificación del 95% en el impuesto de sucesiones.

Jubrique, Málaga

La población malagueña de Jubrique se ubica en el Valle del Genal, a 559 metros de altitud, y con una población de 545 habitantes. Cuenta con un destacable patrimonio histórico con emplazamientos como la Iglesia de San Francisco de Asís, del siglo XVI, o la Ermita de la Santa Cruz del Chorrillo, del siglo XVIII.

Este pueblo cuenta con iniciativas como la creación de un vivero de empresas, la oferta de cursos de formación o la promoción de productos locales. Además, también se beneficia del Plan Estatal de Acceso a la Vivienda 2022-2025, que ofrece 10.800 euros para la compra de una vivienda.

A Xesta, Pontevedra

A Xesta es una aldea situada en el municipio de A Lama, en la provincia de Pontevedra, Galicia. Cuenta con un total de 300 habitantes y está rodeada por un paisaje rural y montañoso y al lado del río Verdugo y el Monte Coto da Pena. Además, conserva edificios emblemáticos como la Iglesia de San Bartolomé, del siglo XVIII, y el pazo de A Xesta, del siglo XVI.

A Xesta ofrece alquileres a un precio de 100 euros mensuales y la asociación de vecinos ha creado un banco de casas que ha captado a más de cien interesados.