La oficina o el lugar de trabajo es un ámbito en el que solo parecen importar términos como productividad, esfuerzo, objetivos o resultados. Existe la creencia de que el espacio de trabajo solo puede ser un lugar serio, en el que nos estamos jugando demasiado como para tomárnoslo a broma.
Sin embargo, también está demostrado que el buen ambiente y el humor en la oficina ayudan a aliviar tensiones y a estrechar relaciones con los compañeros de trabajo. Y es que el buen humor y el optimismo siempre son buenos compañeros en cualquier ámbito, siempre en su justa medida.
Y hablando de humor, os traemos una serie de chistes de empleos y oficios que, a buen seguro, os ayudarán a ti y a tus compañeros a reíros en el trabajo y hacer la jornada laboral más amena. Eso sí, ¡Cuidado con contar alguno demasiado comprometido delante del jefe!
Al final de un juicio, el abogado le dice a su cliente:
- Como verá, ha sido usted declarado inocente gracias a mi defensa. Pero, en confianza, dígame: ¿Fue usted quién robó el banco?
Y el cliente responde:
- Yo creo que lo robé, pero después de oír sus alegaciones ya no estoy tan seguro.
Un hombre llega tarde a su trabajo y el jefe le grita:
— ¡Tenías que haber estado aquí a las ocho y media de la mañana!
A lo que el trabajador le responde:
— ¿Por qué? ¿Qué pasó a las ocho y media?
Un hijo ve a su madre delante del ordenador con los ojos cerrados y le pregunta:
– Mamá, ¿Qué haces delante del ordenador con los ojos cerrados?
A lo que la madre responde:
– Es que Windows me dijo que cerrara las pestañas.
En unas pruebas psicológicas para un trabajo, llega el primer aspirante:
– A ver, cuente usted del 1 al 10.
– 10, 9, 8, 7, 6, 5, 4, 3, 2, 1.
– Pero, ¿Por qué cuenta usted al revés?
– Es que en mi anterior trabajo era el que hacía la cuenta atrás en el lanzamiento de los cohetes de la NASA.
Llega el siguiente candidato y le vuelven a pedir que cuente de 1 a 10.
- 1, 3, 5, 7, 9…
– Pero, ¿Por qué solo cuenta los números impares?
– Es que en mi anterior trabajo fui cartero comercial.
Llega entonces el último candidato y antes de pedirle que cuente del 1 al 10 le preguntan cuál fue su anterior empleo, a lo que este responde “funcionario”.
– Bien, ahora cuente del 1 al 10.
– 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7 sota, caballo y rey.
En un coche viajan tres ingenieros, uno de ellos mecánico, otro electrónico y otro informático. De repente el coche se para en mitad de la carretera.
El ingeniero mecánico baja del coche y comienza a mirar el motor, las tuercas y piezas, etc, pero no encuentra nada raro.
Entonces se baja el ingeniero electrónico del coche, revisa la batería, las conexiones electrónicas, y tampoco encuentra nada raro.
Por último, baja el ingeniero informático y dice:
– Oye, ¿Y si probamos a bajarnos y subirnos otra vez?